Hace bien poquito instalé MeeGo 1.0 en mi Koji, y eso hizo que me volviera a picar el gusanillo de las distribuciones Linux específicamente orientadas a netbooks. Prácticamente todas las grandes han hecho movimientos en este sentido, pero yo quería probar primero las virtudes de la nueva Ubuntu10.04 LTS Lucid Lynx, solo que en su edición para netbooks, y llamada Ubuntu Netbook Edition.

No hay mucho de nuevo en la interfaz de Ubuntu Netbook Edition (UNE, antes UNR -Ubuntu Netbook Remix-), ya que esta distro hace tiempo que está disponible y su  interfaz, con un lanzador centralizado de aplicaciones, es un concepto que trata de mejorar el acceso a documentos y aplicaciones en las pequeñas pantallas y resoluciones de las que disponen los netbooks. Eso no es necesariamente malo, y aunque yo prefiera la interfaz de GNOME tradicional, me parece buena idea que adapten la experiencia de usuario para estas pantallas.

Lo que está claro es que la idea funciona: ahora mismo escribo esto bajo Chromium en UNE 10.04, y aunque mi Koji últimamente está notando los efectos de mis perrerías (ahora cuento más sobre eso) en UNE la cosa va relativamente suave. Y eso ya es todo un logro.

Una de las claves de UNE es precisamente la maximización de todas las ventanas. No hay varias ventanas en cascada: cada una ocupa su propio espacio completo en el escritorio, y la barra superior del sistema está muy requetebien pensada. Ocupa muy poquito, y cuenta con esa nueva iconografía de Ubuntu que es más elegante y apoya la usabilidad, tanto a nivel visual como a nivel de ejecución.

Ubuntu Netbook Edition es por tanto un pequeño redescubrimiento para mí. He dejado de lado la instalación previa que tenía de Ubuntu 10.10 en el netbook, y dejaré que UNE me siga convenciendo durante un tiempo a ver cómo se comporta. Pero no es la única alternativa.

Y es que aparte de UNE quería darle un tiento a alguno de los acercamientos que las distros habían hecho hacia el terreno de Moblin. Resulta que la cosa no era tan sencilla, y la interfaz de Moblin no es fácil de instalar en una distro convencional. openSUSE, Mandriva o Fedora lo facilitan, pero yo soy un poco cabezón y quería combinar Ubuntu y Moblin. Así que ayer me encontré con una distro específica que lo hacía y que salió del acuerdo entre Dell y Canonical.

Ubuntu Moblin Remix es una distro que ha sido descatalogada, y es que por lo que yo sé la idea ya no tiene sentido, sobre todo después del anuncio de Ubuntu Light y del proyecto Unity. Pero tiene su encanto, sobre todo porque fue el intento de unir Moblin a Ubuntu cuando Canonical no parecía demasiado convencida del valor de la propuesta.

Lo malo es que la imagen para grabar en un CD o para un pendrive USB es un peligro. Ya me había pasado con LinuxMCE -segundo resultado en la búsqueda de Google, uauh, y eso que la puse a parir– una distro que prometía revolucionar el concepto del set-top-box y que se ha quedado en un proyecto olvidado e ignorado. Y con razón. Pero a lo que vamos. Aquellas pruebas con LinuxMCE provocaron que cuando metías el LiveCD comenzaba la instalación directamente, sin avisar, y sin dar un pequeño aviso antes de particionar tu disco duro. Así que si no andabas atento, te reformateaba todo a su antojo.

Pues bien, eso mismo me pasó ayer en el Koji con Ubuntu Moblin Remix, que me hizo la puñeta solo a medias porque el Koji es para lo que es: para guarrear. No guardo nada importante en él, y lo uso como equipo de batalla, así que simplemente me resigné y eso me dio una oportunidad para volver a activar la vena de probar distros y plataformas varias para el netbook.

Aparte de eso, lo cierto es que el comportamiento de Ubuntu Moblin Remix es algo cutre. Se nota que era una disto pensada para el mercado de EE.UU., porque es complicado maquearla para que funcione de forma más o menos similar a como lo hace una Ubuntu convencional con Moblin, que es lo que yo quería. Si uno quiere probar Moblin, mejor que lo haga por separado, o bien que opte por MeeGo, que hoy por hoy me parece un dignísimo sucesor que ha retomado el proyecto justo como debía.

Así pues, bien por UNE, y no tanto por UMR, que me temo que desaparecerá muy prontito. Además, tengo que reinstalar MeeGo y necesito espacio en disco 🙂