Tecnología

Linus Torvalds y la bendición de los dictadores benévolos

Da igual que me lo hubiéseis preguntado ahora o hace 25 años. Si tuviera que elegir a qué persona me gustaría entrevistar, esa persona sería Linus Torvalds. Me parece sencillamente alucinante que alguien así logre mantener un perfil bajo siendo responsable de uno de los proyectos tecnológicos más importantes de nuestro tiempo.

Ese proyecto, cómo no, es Git (el kernel) Linux. He hablado ya en otras ocasiones de Linus —seguro que me perdona que le tutee— porque mi vida, como la de otra mucha gente en el ámbito informático, está entrelazada con la suya. Conocí Linux cuando estaba en la facultad, poco después de que lo lanzara, y aunque me costó instalarlo en mi Amiga 1200 acabé enamorado de aquel sistema operativo abierto y muy friqui.

Acabé teniendo la oportunidad no solo de usarlo, sino también de escribir mucho de él. Era el encargado de analizar las distros Linux en PC Actual, y con los años acabaría siendo el creador de MuyLinux, que más de una década después de que me fuera está más fuerte que nunca.

PC Actual de septiembre de 2005. Ahí está mi comparativa de distros de ese mes. SUSE Linux Professional 9.3, ganadora. Era estupenda, sí.

Con el tiempo fui usando un poquito menos Linux y un poquito más otras alternativas como Windows y, al final, macOS, que es el que más uso hoy en día. No por nada: en realidad mi trabajo tiene ya poco que ver con el sistema operativo porque el 95% de lo que hago se puede hacer en un navegador. Es simple costumbre y cierta dependencia de la máquina que uso, un Mac mini M4 que va estupendo pero que para mí es, sobre todo, silencioso y eficiente.

En eso, como en lo de Linux, coincido al 100% con Linus Torvalds, que como digo inexplicablemente no está al frente de una megacorporación ni está podrido de dinero. Él siempre ha preferido mantener una posición mucho más silenciosa a pesar de ser el máximo responsable del desarrollo del kernel Linux, y aunque alrededor de su proyecto varias empresas y personas se han hecho multimillonarias, él no ha tenido ni tiene problemas al respecto. Es un tipo sencillo.

Le he ido siguiendo a lo largo de los años y de cuando en cuando tengo la ocasión de escribir algo sobre él, pero ayer tuve la suerte de encontrarme por sorpresa con la entrevista que le hizo Linus Sebastian, de LinusTechTips, a Linus Torvalds.

Casi una hora de entrevista absolutamente fantástica en la que por cierto, se ve a Linux en forma (ha perdido bastante peso, parece) y con una sonrisa Profidén. Sigue hablando sin apenas abrir la boca, de una forma curiosa, pero lo que no ha perdido es el sentido del humor: si alguien podía hacerle una entrevista simpática, ese era Linus Sebastian, que comparte nombre aunque él solo sea «Fake Linus», como decía el verdadero Linus (Torvalds).

La entrevista es, sobre todo, divertida. En ella no para de haber chascarrillos y bromas simpáticas, pero siempre intercaladas con las mismas preguntas que precisamente yo hubiera elegido si tuviera que entrevistar a esta leyenda. O al menos, muchas de ellas, porque la de elegir memorias ECC para sus equipos sí que no la tenía apuntada 😉

Me pareció especialmente interesante lo que dijo de la IA y sobre todo del vibe coding: «es genial para iniciarse en la programación. Creo que va a ser una cosa horrible de mantener», en referencia a que ese código generado por la IA suele contener errores y claro, al final el programador se va a convertir en revisor.

Estuvo además bien ese discurso conciliador con NVIDIA o Microsoft, pero me conquistó su comentario sobre privacidad:

«Mi enfoque hacia la privacidad ha sido que soy tan público que cuanto más pueda envenenar ese pozo, mejor estoy. Simplemente dalo todo y sé tan poco interesante que a nadie le importe».

Es una táctica curiosa. En lugar de estar intentando esconderte en internet —algo virtualmente imposible— lo que él hace es ser tan poco interesante que no le importes a nadie. Qué bueno.

No sé si lo habéis escuchado en alguna ocasión, pero os recomiendo hacerlo en esa entrevista, porque vale la pena. Es curioso como Linus Sebastian le menciona que se leyó su libro autobiográfico ‘Just for Fun’, pero lo que no menciona es que en realidad es un libro súper antiguo. Yo me lo leí ya tarde, en 2020, y ya entonces me quedé con ganas de que su biografía acabara actualizándose, pero no lo ha hecho.

Es una pena, porque me encantaría leerla y me encantaría aún más escribirla. No creo que jamás tenga la oportunidad de hacerlo, pero lo que sí pude hacer es escribir una pequeña historia de ficción que quizás recordéis en ‘El milagro Linux 25 años después (I)‘ y que nunca terminé de escribir. Voy a tener que hacerlo, pero tanto si eso cae como si no, ojalá una buena biografía de este mito. O un documental que le ponga donde se merece.

Porque este tipo sencillo, que nunca quiso ser un dictador benévolo, ha logrado hacer algo que pocos seres humanos han logrado.

Ha logrado que el mundo fuera un poquito mejor.

Bien por ti, Linus. Bien por ti.

Suscríbete a Incognitosis

¡Recibe en tu correo las nuevas entradas!

Standard

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *