Aunque mi último post hablaba del 15 aniversario de Google Maps, en realidad ese cumpleaños no era ese día, sino que era hoy. Como no quiero repetirme aprovecho para escribir sobre algo que tenía apuntado desde hace algún tiempo. Una idea que no es nueva pero que si no conocéis igual os mola.

Y es que el otro día aparecía en Digg un desarollo chulísimo. Un chaval llamado Andrei Kashcha había creado el llamado City Roads Project, que cogía mapas de OpenStreetMaps y los convertía en singulares obras de arte en las que ciudades de todo el mundo aparecían como un curioso entramado de líneas en las que calles, plazas y avenidas acababan generando una curiosa obra de arte.

El servicio permite además personalizar un poco estos mapas artísticos y salvarlos tanto como PNG como SVG, y de hecho podéis coger el código del proyecto software y mejorarlo. Sencillamente fantástico.

Yo ya había leído algo en el pasado sobre servicios que permitían hacer cosas parecidas y, básicamente, convertir mapas en arte. Tras investigar un poco descubrí que los servicios de este tipo son numerosos y aunque la base es la misma —mapas hechos arte con cuadros muy pintones (y nunca mejor dicho)— las distintas variantes permiten conseguir resultados muy originales y que seguro pueden darle un toque simpático a vuestra oficina, habitación, salón, despacho o cualquier otro lugar. Veamos algunos de los más interesantes que he encontrado:

Wijck

Este servicio creado por un grupo de personas en Amsterdam es un gran primer ejemplo de lo que se puede lograr con estos proyectos. Transforman mapas en cuadros, pero incluso puedes encargarles cuadros de barrios, pueblos o ciudades aún más especiales (y caros) que se añaden a todos los que ofrecen por defecto. Los mapas-cuadro pueden ser de hasta 50×70 cm.

Hay algunos ya creados por defecto. De España, por ejemplo, tienen barrios madrileños como Embajadores, El Raval o Malasaña (con su eñe). Mola. No solo hay cuadros: estos chavales permiten crear pequeños libretos, postales, o velas.

Mapiful

Esta gente va a mucho más en cuanto a personalización porque cada mapa puede tener acabados muy distintos que van desde las líneas en blanco y negro hasta un diseño en «Coral» con tonos de ese tipo pasando por mapas «náuticos». Podremos cambiar tamaño, orientación y etiquetas, dando un resultado que puee dar más juego.

Además tenemos la opción de elegir distintos tipos de marcos y los tamaños van hasta los 70×100 cm, así que son un poco más grandes que los de Wijck. Hay un par de apartados simpáticos: la Comunidad y la Inspiración permiten que los usuarios compartan cómo ha quedado el cuadro allí donde lo han puesto, y desde luego este servicio es muy, muy completo.

Grafomap

Similar a Mapiful, permite también seleccionar cualquier ciudad para luego hacer zoom en ella hacia fuera o dentro y encuadrar ese mapa que se va a convertir en un cuadro. Los estilos de personalización son mucho más coloridos que Mapiful, así que buscáis algo de este estilo esta es mejor opción.

Además vuelven las opciones en cuestión de acabados: podéis encargar solo el cuadro de papel, pero también el cuadro enmarcado o bien con una pequeña estructura para colgarlo. Hasta podéis haceros una camiseta, si lo preferís. El tamaño máximo es de 70×100.

InkAtlas

Algo más simplón, InkAtlas ofrece también una forma sencilla de imprimir mapas a gran tamaño, y parece un servicio más orientado a crear mapas personalizados casi «desechables» que cuadros, y de hecho ofrecen un bono para imprimir por ejemplo 50 mapas desde 55 euros.

El servicio está además bien traducido al español, y los mapas pueden tener estilos curiosos, no tan artísticos y sí más técnicos. Por ejemplo podremos añadir pistas GPX y estratos GeoJSON, lo que claramente lo destina a un tipo de usuarios distinto. Aún así, oye, curiosetes.

HebStreits

El diseño del sitio web de este servicio engaña porque parece algo simplón también, pero esta gente añade su propio estilo a los mapas y la verdad es que los resultados son bastante chulos. En su sección de mapas tienen cosas más «tradicionales» y luego mapas muy originales que ellos llaman «Confetti» o «Colorful». La lástima es que parece que no puedes crearlos tú a medida: están los que están, sin más.

De hecho ese modo «sketch» que acompaña al nombre del servicio se hace muy patente no solo en los cuadros de mapas, sino en otros tipos de productos que ofrecen con gente, arquitectura o paisajes. La búsqueda de ciudades tarda bastante, pero la verdad es que por ejemplo en el caso de Madrid salen cosas muy chulas como la de la imagen (aunque poco reconocibles, la verdad). Por cierto, ellos no te los imprimen: compras la imagen como tal para imprimirla luego por separado.

TiltMaps

Otra variación original de los mapas que podéis imprimir y que en este caso se centra en añadir una perspectiva (45º, 55º o 65º de inclinación) al mapa para tener esa sensación de profundidad en el resultado final.

Podremos además elegir colores del mapa, personalizar el título y subtítulo que aparece (qe no tienen por qué ser las coordenadas) y las tipografías, por ejemplo, además de pequeños iconos que pueden tener su puntito en el mapa final.

CityWood

Vale la pena que pinchéis en el enlace aunque solo sea para ver esa vídeo introducción de fondo que aparece en la página y en la que se ve cómo estos mapas artísticos son aún más espectaculares: están pirograbados sobre madera. Espectaculares.

Evidentemente pueden llegar a ser bastante caros, y el de 90×90 de Madrid cuesta 711,23 euros. Más los gastos de envío, que a España son 18 euros según el sitio web de este servicio. Total, un pico, pero insisto: el resultado es espectacular. Ojo, hay uno en tamaño mini de Nueva York de 12×17 cm por 55 euros, envío incluido. Menos es nada.

CityArtPosters

Propuesta bastante más simplona pero que igual os puede resultar interesante. Al contrario de lo que ocurre con otros servicios no hay opción de crear posters personalizados, sino que tendremos que elegir alguno de los que hay disponibles en su catálogo. Los estilos en los que están disponibles tampoco son súper novedosos si tenemos en cuenta lo que ofrecen servicios como Mapiful o Grafomap, pero como digo, podéis daros una vuelta por si no veis lo que buscáis en otros sitios. El encanto de esto no está como tal en eso, sino en otra cosa.

Resulta que en este servicio podéis obtener el resultado en un sinfín de formatos que van más allá del cuadro. Los mapas pueden ser de hsata 84×118 cm, sí, pero es que podéis obtenerlos también en pegatinas, láminas fotográficas, camisetas y sudaderas de distintos tipos, vestidos, leggings, minifaldas (flipo), vinilo-funda para el iPad o el iPhone, para el portátil, fundas para distintos móviles, tazas, relojes, cojines, postales, cuadernos de espiral, bolsos de mano y hasta mochilas sacos. ¡Alucinante!

MappyThoughts

Tantos servicios similares hacen que cada uno quiera ser diferente en algo, y en MappyThoughts lo qu etienen son desde luego ejemplos muy coloridos si os gustan los mapas más artísticos y menos esquemáticos.

Podremos elegir tres tipos de materiales (Canvas, Dibond y Posters), distintos tamaños y sobre todo esos curiosos estilos con nombres que podrían ser títulos de novelas (o pelis de Antena 3). Por ejemplo ‘Motion of Opportunity’, ‘Mask of Mistery’ o ‘Inminent Ambition’. Los resultados, la verdad, son chulos.

PrintMyCity

Más simple, este servicio permite también imprimir cuadros con mapas totalmente personalizables que mapas que podremos encuadrar, alejar y acercar para que saquen justo el área que nos interesa.

Los estilos recuerdan un poco a Mapiful, y podremos imprimirlos hasta en tamaño A0 (84×118 cm, 55 euros), así que es una alternativa sencilla y rápida para poder obtener ese poster (que no cuadro, ojo) y ponerlo donde más nos guste.

CustoMaps

La interfaz de CustoMaps es algo más aparatosa a la hora de personalizar el maps, porque además del estilo del mapa —me gusta el estilo Mondrian, es simpático— podremos activar y desactivar apartados para que aparezcan o no en el mapa.

Así, podremos mostrar estaciones de tren, edificios, aeropuertos, fronteras, parques nacionales, agua o sitios de agricultura (what?). De hecho hasta podremos señalar todos ellos con distintos colores, lo que desde luego puede tener su punto para quien busque destacar algunos de esos apartados sobre el resto. Incluso permite añadir rutas con ficheros GPX o KML, curioso.

Stamen

Este servicio es algo distinto porque no te permite comprar un cuadro ya preparado para que lo cuelgues: lo que hace es convertir mapas en arte (o lo intenta) ofreciendo distintos estilos que aplicar a los mapas que tú mismo puedes encuadrar como también hacen otros servicios.

Lo chulo de Stamen (en mi opinión) son los estilos que ofrece, realmente curiosos y que abarcan cosas muy artísticas como el estilo acuarela (‘Watercolor‘) a otros más esquemáticos y casi de cómic como el ‘Toner‘. Cada uno, de hecho, tiene su propio sitio web (e incluso su repo en GitHub) para que exploréis el mundo en este tipo de estilos, como si fueran capas de GoogleMaps o, en este caso, OpenStreetMaps.

Este proyecto Open Source mola un montón y da pie a que cualquiera pueda juguetear con él para crear sus propios estilos. Los componentes y las explicaciones para hacerlo están en el sitio web, así que si os animáis, ya sabéis.

Mapas de ‘háztelo tú mismo’

Además de todos estos servicios que permiten comprar cuadros y otros productos ya preparados para disfrutar con esos mapas convertidos en arte, hay también servicios que de hecho permiten juguetear con los mapas y crear pósters o cuadros aún más personalizados.

Uno de ellos es el citado Stamen, pero también el City Roads Project que mencionaba como inspiración de este post. Hay formas manuales de crear mapas de líneas artísticas, y también proyectos software como Tangrams algo más complejos de usar pero que también tienen su punto. Otra que parece potente pero también algo compleja de usar es Maperitive, que tiene hasta una API Python, scripting y automatización para ir más allá si os apetece.

Aquí es inevitable hablar de MapBox, la empresa que entre otras cosas permite también jugar con la cartografía para convertirla (entre otras cosas) en arte. Con MapBox Studio, por ejemplo, es posible crear mapas curiosetes.

Seguro que hay más servicios de este tipo —comentad, comentad—, pero creo que aquí hay algunos bastante curiosetes y que pueden servir para que le deis un toquecito curioso a nivel decorativo a vuestro hogar a sitio de trabajo. Incognitosis en plan revista de decoración, qué fuerte 🙂