En realidad ya hace tiempo que escribí una reflexión similar al respecto, ‘De vendemotos y meapilas‘, pero la rueda de prensa de esta mañana en un céntrico restaurante madrileño me ha vuelto a demostrar cómo un evento/encuentro que podría ser interesante se convierte en un mero publirreportaje del que los periodistas con un mínimo de criterio solo pueden salir atufados.
Uno llega al citado restaurante -Chef Jambon, por ejemplo- y se encuentra con el panorama de moda. Por un lado, saludos a algunos compañeros de los medios -al menos uno se ve con los amigos de profesión-. Por otro, el equipo de responsables de la empresa -llamémosla Lexington Inc.-, que se muestra amable en la distancia. Uno de los jefes se acerca y me pregunta que en qué medio trabajo. Le digo que en Xataka, pero debe ser que los jefes de Lexington Inc. leen otras cosas relacionadas (o no) con su negocio, porque el nombre le sonaba a chino. Mal panorama.
De ahí en adelante, todo a peor. En la mesa tenían uno de sus últimos productos -el FastThing XR2i, pongamos- , que en el CES ha sido la sido muy galardonado (y que mola, ciertamente) pero que allí tenían como un pequeño trofeillo. Porque lo importante no era hablar de cacharros, sino de cifras y resultados. Que como eran (aparentemente) buenos, daban para presumir. Somos guays, y queremos gritarlo al mundo. Y todo eso.
El problema con ese mensaje es que las empresas españolas (por mucho nombre inglés que yo les ponga) no dan normalmente cifras de ventas o datos concretos. Así que cuando en una diapositiva te cuentan que han multiplicado por tres sus ingresos o que han crecido un 200% en unidades vendidas, te quedas plano. Que sí, que eso puede ser una noticia positiva, pero sin el dato de referencia -cuál era el ingreso de partida, cuántas unidades vendíais y cuántas vendéis ahora- el mensaje se queda en un “porque yo lo digo”. Y mientras, eso sí, el FastThing XR2i, del que depende parte del futuro de la empresa, cogiendo polvo. Somos demasiado guays para hablar de él mínimamente.
No puedo con los cuentacuentos profesionales. Me superan.
A tus años y te sigues mosqueando? A sido asi y sera toda la vida mi primer recuerdo data de la epoca de asthon tate (dbase) cuando en vez de presentar el producto presentaban estados de cuentas y crecimiento de la empresa….. Y seguira asi per sempre…..
Je, lo de siempre… Lo más interesante que puedes sacar de estas historias es una buena comida, con suerte. Como se dice en Galicia, «fala, fala, e non dí nada». Pues eso.
Bueno, es que el blog me deja hacer estas cosas. Lo decía Shrek con su sabiduría infinita. Mejor fuera que dentro 😉