Hacía meses que se rumoreaba que Amazon estaba maquinando algo así, y ayer Jeff Bezos confirmó esos rumores. Presentó la nueva familia de tablets Kindle Fire HD (por cierto, página copiada a machete de las de Apple, qué fuerte) que además de renovar su modelo de 7 pulgadas -a 199 dólares, amenaza total para el Google Nexus 7- también supuso el inicio de la oferta de tablets con pantalla de 8,9 pulgadas. Quizás deberían haber tenido otro nombre (¿Kindle Super Fire HD?) porque Amazon no diferencia esos modelos por el nombre, pero eso no es lo importante: lo importante es que Amazon se ha internado en un segmento que nadie se había atrevido a tocar con tanta ambición como Apple: el de los tablets de gran formato.

Y además lo ha hecho con una propuesta más que interesante: dos modelos de 8,9 pulgadas que por 299 dólares y 499 dólares (este último con 32 Gbytes de almacenamiento y conectividad 4G LTE) son claramente rivales de los actuales iPad. Sobre todo por una circunstancia fundamental: el precio. Tener un tablet de ese tamaño, con esa resolución (1.920×1.200, 254 DPI frente a los 2.048×1.536 y 264 DPI del iPad 3), con salida HDMI directa (ojo a eso) y con la oferta de contenidos de Amazon es brutal, sobre todo cuando el iPad 3 cuesta 499 dólares en su modelo básico. Podéis comparar ambos modelos y alguno más en la excelente tabla disponible en The Verge (su sistema de tablas comparativas es lo mejor que he visto en la web en años), pero es que hay otro dato más relevante:

Android.

Puede que Amazon ofrezca una versión hipercapada de Android 4.0 (confirmado) en sus nuevos tablets, pero es que la llegada de ROMs personalizadas con Android 4.1 Jelly Bean para los Kindle Fire es algo cantado. Llegarán, y probablemente no tarden mucho en hacerlo. Y para los que no pueden disfrutar del catálogo Amazon en toda su extensión (todos los que vivimos fuera de EE.UU.) eso permite contar con un dispositivo que por un precio que es casi la mitad del iPad 3 es comparable a él en todas las facetas y probablemente superior en algunas de ellas.

Parecía que a Apple no se le podía toser, y que de hecho sería ella quien tosiera a los rivales pronto con los hipotéticos iPad mini, pero no. Amazon le ha dado la vuelta a la tortilla y está aplicándose lo de que «la mejor defensa es un buen ataque». Veremos cómo reaccionan en Cupertino, porque por mucho que digan los fanboys de Apple, elegir entre un iPad 3 a 499 dólares y un Amazon Kindle Fire HD 8,9 pulgadas a 299 dólares no será nada fácil para los amantes de los productos de Cupertino. ¿Por qué? Por que la pasta es la pasta. Ahora más que nunca.