Tecnología

Menéame y los desastres en la nube

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No es que tenga una relación fantástica con Ricardo Galli, de Menéame, pero comparto su frustración por la «increíble  serie de catastróficas desdichas» que provocaron que hace pocos días Menéame estuviese totalmente inaccesible. Una tormenta y un rayo caído en el lugar más inoportuno del mundo -para Menéame, claro- hicieron que los servicios en la nube de Amazon en los que se basa este clon de Digg dejaran de funcionar del todo. La caída de esos servicios fue tan gorda que afectó a PayPal, a Microsoft y a un montón de sitios web más, aunque obviamente el caso más cercano lo tenemos en Menéame.

En un post reciente Galli explica todo lo sucedido en esos días de pesadilla. Parece que no tenía precisamente la suerte de su lado, porque a cada momento surgía un nuevo problema que impedía resolver el tema lo antes posible. El fallo, como él mismo reconocía, era haberse ido de vacaciones 4 miserables días sin el portátil. Y probablemente también tener un sistema que depende de una sola persona, algo que como se ha comprobado puede provocar unos sustos bastante gordos, por impensable que sea que caiga un rayo justo donde cayó aquel de Amazon.

Desde mi «pequeño» papel como sysadmin y CTO en TPNet sé lo que se sufre con estos problemas: de mi depende que todo vaya suave en nuestros sitios web, y cuando algo falla -y algunas veces el puñetero Murphy hace de las suyas- se pasan momentos muy, muy malos. Da igual todo lo que puedas hacer -mira que en Menéame habían contemplado riesgos importantes, pero ni por esas-, porque puede surgir una situación que no habías considerado que podría darse, y que pone a prueba los nervios de uno… y de la gente que depende de él.

Y por supuesto, la reflexión principal es la de la validez de la nube como único recurso para almacenar nuestros datos. A todos aquellos que opinan que la nube es el futuro, que los ordenadores no necesitan disco duro, y que algún día trabajaremos con todos nuestros datos disponible anywhere, anytime, me gustaría decirles que estas cosas, por improbables que parezcan,  no solo pueden pasar. Pasan. Y Menéame pudo recuperarse porque su infraestructura es muy sólida. Pero al usuario final que depende de un servicio que no controla un suceso así puede causarle un disgusto brutal. Así que ya sabéis, evitad el susto ante esos desastres en la nube. Backups en local. Siempre. Y si hacéis uno en un disquito duro externo y lo dejáis en casa de vuestros padres -por ejemplo- mejor que mejor. Nunca se sabe.

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3 comentarios en “Menéame y los desastres en la nube

  1. Alex dice:

    Que razón tienes, y por eso los cores de negocios tienen dos, tres y hasta cuatro copias de datos en lugares distantes. El cloud computing es ideal para sincronizar contenidos a los que poder acceder cuando no estemos en casa, por ejemplo desde un tablet o un móvil pero no como recurso único para almacenamiento.

    Hay que concienciar a la gente del enfoque que requiere trabajar en la nube. No es olvidarse y punto, podremos olvidarnos de hacer el backup todos los días porque tendremos dos copias, una local y otra «in the cloud» sincronizadas, así que un backup mensual es suficiente para recuperarnos de desastres poco probables como perder al mismo tiempo nuestras copias online y local.

  2. Pensar que puedes tener toda la información y aplicaciones de tu empresa ‘en la nube’ sin más, es de ser un poco iluso.

    Siempre hay que contemplar cualquier posible eventualidad, por muy remota que parezca.

  3. Por cierto, leyendo la entrada de Galli, lo de no tener documentado el proceso de recuperación para que otro pueda hacerlo en su ausencia… viniendo de alguien que da clases en una Universidad y que tan ‘sobrado’ se monta con las críticas, es de traca.

    Que tampoco pasa nada, porque aunque muchos se quejaban en Twitter de la caída de Meneame tampoco ha pasado nada porque no estuviese online. Pero si tengo un negocio que factura unos 500‚¬ al día, unos 15000‚¬ al mes, lo menos es asegurarme de que no dependa todo de mí.

Comentarios cerrados.