Estoy que lo tiro con esto de las reparaciones. Creo que hasta voy a tener que montar un negocio paralelo de servicio técnico porque me estoy convirtiendo -a la fuerza- en un pequeño experto en cómo revivir productos a los que Murphy les tenía tirria.
Primero logré arreglar el Nexus 7 al que se le había estropeado la pantalla. Luego me arreglaron -aquí me temo que no tuve ningún mérito- el Dell XPS 13 que parecía ya defenestrado, y desde ayer (no quería contarlo entonces) tengo funcionando casi a la perfección el OnePlus One.
Como comenté en mi relato de esa serie de catastróficas desdichas de estos días, el OnePlus One había caído de la forma más tonta pero más fatal posible, quedando la pantalla quebrada con una perfecta y preciosa raja diagonal que lo convertía en un ladrillete.
Como la reparación oficial me iba a salir por un pico, acudí a una tienda que encontré vía eBay (curioso, para esto Amazon suele ser peor) en la que me vendían una pantalla compatible y herramientas para el montaje por 43,38 euros. Eso fue el mismo 5 de septiembre en el que os contaba mi pequeña desgracia, y ayer, una semana después, tenía la pantalla en casita.
Ahí empezó otra pequeña aventura entretenida con destornilladores y herramientas varias que incluían en el paquete pero que también había por casa. En estos días he utilizado más el secador de pelo que nunca en mi vida, por ejemplo, pero también tuve que tirar de un cuchillo normal y corriente para poder extraer la batería en uno de los pasos del proceso de desmontaje (véase el documento gráfico).
El proveedor de la pantalla advertía de los peligros de la electricidad estática, así que a falta de pulsera antiestática me armé con un par de guantes de látex que teníamos por casa y me puse manos a la obra. Aquí, como siempre, la maravillosa internet fue una compañera de lujo. Sobre todo YouTube, que parece no tener límites a la hora de ilustrarnos con todo tipo de tutoriales en este ámbito. La tienda que me vendió la pantalla incluso me recomendó este vídeo en particular (o guías con fotos del paso a paso como esta) para ir siguiendo el proceso, aunque en realidad hay alguno más que consulté en algún paso concreto que no me quedaba del todo claro.
Aquí me superé una vez más, porque el OnePlus One es bastante más difícil de desmontar que el Nexus 7. En iFixit le daban un 5 sobre 10 en su particular índice de reparabilidad, y la verdad es que la cosa tiene miga. Tanta que acabé cometiendo un error bastante gordo en uno de los pasos.
Para sacar la placa base en la que está entre otras cosas la cámara posterior es necesario extraer primero los botones de volumen y el botón de encendido que están «insertados» en el chásis o marco del OnePlus One. Ahí es donde hay que usar una cuchilla bien afilada -yo lo hice con un cutter- para extraer esos botones, pero no di con la tecla en el botón del volumen y en lugar de sacar todo el botón saqué solo la «lenteja» que es la que presionas y activa el contacto para encender o apagar el dispositivo. Acabé logrando sacar los botones de marras, pero en el proceso, como digo, me cargué el botón de encendido. Más sobre esto más adelante, pero al final la cosa es superable.
Salvo por ese detalle, el resto del proceso fue bastante bien. De hecho me sorprendió que mi ya habilidad natural con el citado secador permitió que extrajera la pantalla del OnePlus One del marco en el que iba pegada a la primera y sin romper nada. Como si fuera una pieza original, en plan magistral. El truco, aparte de aplicar bastante calor, fue (creo) hacer palanca desde dentro con el dedo para ir forzando a que la pantalla se despegara del marco sin más. El resultado: por fin podía comenzar a montarlo todo de vuelta.
Como suele ocurrir en estos procesos, montarlo todo de vuelta es mucho más sencillo y menos arriesgado que el proceso inicial, así que a los 10 minutos tenía el terminal preparado para comenzar a funcionar. Pensé que lo del botón de inicio sería una condena que haría que tuviese que tirar el OnePlus One, pero al final la cosa no ha sido tan grave.
Como no podía encenderlo con el botón acudí a la solución fácil: contacto artificial con un destornillador plano con el que pudiera simular el botón de inicio. El botón de volumen también había sufrido un poco, pero al final ese logré apañarlo y ahora funciona correctamente. Atornillé todo, puse mi carcasa bambú, encendí y… voilà. Ya tenía de nuevo mi OnePlus One funcionando con su pantalla táctil impoluta y preparada para meterle dedazos por doquier.
Ahí comencé a ver si para lo del botón de inicio había opciones. He encargado ya un botón de reemplazo en Aliexpress (5 euros) que no sé si podré montar porque creo haberme fijado en que iba soldado a la placa (no tengo soldador, pero a este paso voy a tenerme que comprar uno), pero sea como fuere quiero ya puestos tratar de solucionar eso bien. Aún así, había soluciones para lo que suele hacer ese botón de inicio:
- Para apagar la pantalla y bloquear el dispositivo puedo hacer doble toque en la barra superior (donde está la hora) gracias a CyanogenMod. Aquí probé una aplicación llamada Power Button to Volume Button que hace algo similar, pero luego me di cuenta de que estaba haciendo el panoli: tenía esa función de bloqueo alternativo en la ROM del sistema operativo. Primer problema atajado.
- Para volver a encender la pantalla, doble toque en la pantalla, otro de los gestos que soporta el OnePlus One con CyanogenMod y que me ha venido de perlas para apagarlo.
- Para reiniciar o apagar del todo el dispositivo (o reiniciarlo en Recovery) sí que acabé instalándome una aplicación llamada Simple Reboot que te permite acceder a un menú de reinicio siempre y cuando tengas el smartphone rooteado, como es mi caso.
- Lo más inquietante: ¿cómo enciendo el dispositivo si lo tengo apagado del todo? Pues de nuevo la bendita internet acudió en mi ayuda. No sé dónde lo vi, pero la solución es bastante simplona aunque necesitas estar cargando el móvil. Al conectar el cable de carga -ya sea al enchufe, ya sea a una batería externa, ya sea a un PC o portátil- y mantener presionado el botón de bajar volumen acabas en Recovery -en mi caso, TWRP-, y desde ahí basta con hacer un reinicio al sistema para que el teléfono se inicie normalmente. Chapeau!
Así pues, amigos lectores, me congratula informaros de que ya tengo mis tres dispositivos funcionando. No sé durante cuánto tiempo seguirán dando guerra, pero el caso es que por un precio relativamente módico (22 euros del Nexus 7, 100 del Dell XPS 13, y 45 del OnePlus One) vuelvo a poder recuperar mi rutina con mis dispositivos.
No está nada mal, y lo que he aprendido por el camino no me lo quita nadie. Lo dicho. A montar una tienda de reparación de equipos electrónicos y a forrarme. Va a ser que no, je. Esta vez sí incluyo el botón de donaciones de PayPal, que esto ha resultado ser de lo más instructivo, ¿no os parece?
Si os ha gustado el artículo, quizás queráis aportar (Atención: los 0,50 euros son solo una referencia, podéis modificar la cantidad antes de dar a “Siguiente”). ¡Gracias!
Hola Javier,
Antes que nada que gusto que pudieras echar a andar todos tus dispositivos, el perderlos siempre duele por mucho tiempo que tengamos con ellos, pero ¿eso ha cambiado la imagen que te quedaste de DELL?
No he tenido el infortunio de que se me rompa la pantalla de ningún smartphone pero creo que cuando me suceda (toco madera) intentaría repararla pues ¿qué es lo peor que puede pasar?
Saludos
P.D.
Sigo con el mismo detalle de PayPal, en un futuro intentaré crear una cuenta de otro país.
😉 No te preocupes Overcorp, gracias! Y no, no ha cambiado la imagen de Dell para nada. Han movido cero dedos.
No tiene que ver exactamente pero consejo: instalate si tienes tiempo una ROM basada en CM 14 llamada Nuclear (hecha por españoles ademas). Desde que la tengo he vuelto a amar a Android, y el OnePlus es uno de los poquísimos terminales para el que esta.
Mucho mejor que CM 13 a pelo: batería, estabilidad y customizacion a tope 😉 Hacia mucho tiempo que no veía una ROM así.
Basada en CM 13 quería decir 🙂
Mmm no me da tanto ya por probar ROMs pero igual algún día le doy un tiento. Lo de que sea hecha por gente de aquí mola, eso sí. Gracias por el aviso.
Si montas el sat avisame ya sabes que el porno electrónico me pirra JA JA JA 3, de 3 eso no lo consigues en el PES ni de coña 🙂 ahora a mimar mas tus herramientas de trabajo, y acuerdate disipador para el portátil y no suspender.
Lo del disipador como que no. No tengo ganas de estar con algo ahí bufando o molestando cada tres por cuatro. Creo que voy a bajar de vueltas el procesador (en opciones de energía puedes poner porcentajes de rendimiento) e incluso hacerle un undervolt-underclocking, pero veremos.
Enhorabuena por el trabajo, yo suelo reparar todo lo que me cae en las manos (chollos de los amiguetes incluidos :S )
Si vas a montar el servicio de reparación te recomiendo que te hagas con una pistola de aire caliente o decapadora para no andar tirando del secador cuando hay que despegar, ayuda mucho, yo encontré una en el Lild que por 15€ vale de sobra.
Gracias Miguel, pero lo del servicio técnico era broma. Y desde luego esto no se lo hago a nadie, es un tema demasiado delicado y me arriesgo solo para mis cacharritos. Lo de la pistola del Lidl no es mala idea, thx!
Yo también tengo un Dell muerto que revivir. En mi caso es el xps 1530.
¿Dónde lo llevaste?
Gracias
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