Esta historia está basada en hechos reales.
Harry estaba confuso. Había vivido experiencias traumáticas que le impedían confiar en sí mismo. O más bien, en sus oídos de corchopan, un material que forraba sus paneles auditivos y que evitaba que pudiese apreciar la música como el resto de los mortales.
El pobre corchopan-man tenía la sensación de que jamás podría diferenciar un vinilo de un MP3 o de un FLAC. Cierto que el chico notaba diferencias entre los altavoces discretitos de su coche y el sonido que daba el cutre-altavoz Bluetooth (maldito Bluetooth) que usaba mientras se duchaba, pero eso no le importaba demasiado. Sobre todo porque en la ducha él era el rey del mambo en su pequeño karaoke improvisado: ahí lo que importaba era cantar más fuerte (!=mejor) que el artista de turno, así que la calidad del sonido era secundaria.
Y en esas estaba ante su cuadragesimo tercer cumpleaños, momento en el cual se permitiría un pequeño capricho. Lo tenía decidido: basta ya de auriculares calidad Lidl. Había que valorar lo de invertir de una vez en disfrutar de la música. Allí estaba él, con la página de Amazon en una mitad de la pantalla y en la otra la de Head-fi.org, donde había estado tratando de instruirse un poco sobre los mejores auriculares que podían cubrir sus necesidades. Harry, que normalmente nadaba como pez en el agua en foros técnicos de todo tipo, se dio cuenta de que no solo tenía oído de corchopan: también tenía una ignorancia corchopanera en todo lo que se refería al mundo del audio. De repente se encontraba ante auriculares in-ear, supraaurales, circumaurales, abiertos cerrados y de la madre que los parió a todos ellos.
—No sé, Sally, no me acabo de decidir —apuntó tratando de aparentar una leve confusión.
—Querido maridete, no deberías perder mucho tiempo en buscar la mejor opción para ti. No la hay. Eres corchopan-man.
—Ya, pero quizás con unos buenos auriculares… Mira, en la guía de compras estas he visto los Noble Audio Kaiser 10 que me puedes regalar por mi cumple.
—¿Y cuánto me va a costar la broma? —preguntó Sally mientras hacía multitarea con su Instagram y sus grupos de WhatsApp.
— Pues iría a los básicos de madera exótica. 2.599 dólares de nada.
Sally dejó de hacer multitarea. Lo que tenía que hacer Harry necesitaba de toda su concentración.
— No te lo crees ni tú.
Harry resopló. “Lástima“, pensó. “Estoy seguro de que con esos hubiera llegado al zen cósmico del audiófilo“. O quizás no, se dijo a sí mismo pocos segundos después. Quizás lo que necesitaba eran unos cascos decentes y con buena crítica pero que no le hicieran 1) divorciarse y 2) pedir una segunda hipoteca para financiar el pago.
Siguió consultando los foros mientras se preguntaba por qué narices no hay ninguna página decente en español con recomendaciones de auriculares. “En serio, Sally, ni una“, le dijo a su mujercita mientras se apuntaba la idea para un hipotético futuro negocio. Y mientras se montaba la película de esa startup de éxito que solo lo tendría en su imaginación, encontró lo que buscaba.
— Anda. ¿Y si me compro los Xiaomi Piston 3?
—A ver… ¿18 euros? Este es mi Harry, sí señor. Este es mi Harry —Sally sonrió satisfecha, tanto por saber que esa iba a ser la compra final como por el hecho de que por fin podía volver a darle duro a Instagram y a WhatsApp.
Dicho y hecho. Harry era usuario Premium de Amazon, así que no tuvo que gastar un duro para que apenas un par de días después los auriculares -con un aspecto bastante pro, se dijo tras mirar la página oficial de producto– aparecieran en la puerta de su hogar en su fastuoso mini resort burgués. Allí estaba el pequeño paquete que parecía encerrar más un cargador de un móvil que unos auriculares (chinos) de última generación. Una vez abierta la caja exterior -pocas florituras ahí- se encontró con un envoltorio sorprendentemente decente y con una caja protectora de plasticurri chinorri que no obstante estaba bastante bien acabada. Era chinorri de calidad, se dijo Harry, que quedó contento ante la presentación y el unboxing de los auriculares. Nadie diría que se trataba de auriculares de 18 euros por el envoltorio, se dijo Harry. Como mínimo parecían ser auriculares de 35 euros. Esto marchaba.
Harry comprobó además que el paquetito no solo incluía los auriculares, sino que además tres pares de almohadillas internas de distintos tamaños para según las dimensiones de la oreja de cada cual. Un detalle brillante que de nuevo demostraba que esta gente de Xiaomi lo tenía todo bien atado. Incluso Sally, amante de la simetría y fan del orden sobre todas las cosas, apreció la presentación:
— Cómo mola. ¿Me puedo quedar con la cajita, Harry? — Preguntó con la mejor de sus sonrisas.
Harry, que no estaba haciendo multitarea porque era incapaz de ello, le devolvió la pelota con toda su concentración, que era la misma que justo antes de contestarle:
— No te lo crees ni tú.
Harry volvió a su mundo de auriculares de última generación y tras desenrrollar los Piston 3 los conectó a su OnePlus One para comenzar a probarlos. Al lado tenía sus auriculares Lidl-quality, así que fue cambiando entre unos y otros para ir probando si su afección crónica de oídos de corchopan tenía solución tecnológica a la vista.
— Sally, se me saltan las lágrimas. Noto la diferencia —comentó un estupefacto Harry.
— Qué bien maridete, qué bien. ¿Entonces me puedo quedar con la cajita?
— Patipasiempre —contestó Harry, que seguía absorto en su mundo de ondas celestiales y ni siquiera había escuchado -mucho menos interpretado- la pregunta de Sally.
Los siguientes días Harry se sintió como en una nube. Tuvo además la oportunidad de escuchar los auriculares junto a uno de los mejores -si no el mejor- smartphone del mundo en materia de sonido: el HTC 10 que le habían dejado para analizar en el trabajo. Si en el OnePlus One sus Piston 3 se oían realmente bien, en el HTC 10 la cosa era ya de sobresaliente. Incluso para él, el auténtico corchopan-man, la diferencia era evidente.
La música sonaba más potente, más alta, más clara. Mejor. Sus paseos por los madriles mientras ejercía de reportero dicharachero cobraron una nueva dimensión: la música ya no era algo que solo disfrutaban los demás en el metro o en la calle. Ahora él también tenía el power. Casi le daban ganas de ponerse a bailar de la emoción en medio del vagón. Luego, claro, hubiera pasado la gorrilla, más por disimular que por otra cosa: imaginaos a alguien bailando en el metro por el mero hecho de hacerlo. FAIL.
Pero sus Xiaomi Piston 3 de 18 euros (en Amazon) no eran ningún fracaso. De repente Harry se había reconciliado con la música en su móvil. Bien por los cascos chinorris de calidad a precio de chollo. Bien por las soluciones tecnológicas para la corchopan-people.
Si os ha gustado el artículo, quizás queráis aportar (Atención: los 0,50 euros son solo una referencia, podéis modificar la cantidad antes de dar a “Siguiente”). ¡Gracias!
Impresionante, mejor que lo del Soylent green.
Este mes es mi cumple y lo mismo te honro con un generoso 3,5% de comisión sobre 18€-21% de IVA, que la gran A está que lo tira con sus afiliados.
Por cierto, el tema de los afiliados de la gran A da para un artículo a riesgo de que te cancelen la cuenta.
Gracias Manuti 😉 Lo de los afiliados no lo pillo, hay algún escándalo del que no me haya enterado? Enlace?
Me interesa el tema de los afiliados. Manuti, ilumínanos.
Pues te recomendaría hacerles un «quemado» a los mismos para sacarle su quinta esencia.
Xiaomi tiene una app para ello, o en su defecto youtube, que para generar ruido no hace falta mucho bitrate…
Aún no he encontrado un producto Xiaomi que me haya decepcionado, conociendo sus limitaciones geográficas…
Un saludo
Desde mi más absoluta ignorancia en estos temas , me pica la curiosidad .
¿Qué es hacerles un quemado ?
Diego, estoy en las mismas. Mi ignorancia corchopanera me obliga a preguntarte qué es eso de «quemarlos».
Se refiere a que reproduzcas una serie de audios que se muevan entre distintos rangos para que se muevan los materiales por decirlo así y el tema quede ajustado, como lo de las viejas baterías y cargarlas varias horas antes de usarlas 😀
Estrictamente hablando si eres un melómano de aquellos y escuchas muchos estilos diferentes no debería ser necesario, pero si reproduces normalmente un estilo de música parecido sirve para tomar todo el potencial… samples para hacerlo hay en http://en.miui.com/thread-41227-1-1.html
Genial mk360, gracias por la aclaración. Habrá que darles un poquito de brasero entonces 😉
Que coincidencia, yo llevo algunos días esperandolos, que pronto llegan de China. He probado varios, pero ninguno me habia convencido como los auriculares del control remoto del Roku 3. Pero mi gato se hizo cargo de hacerlos pedazos, despues de llorar un rato tome la desición de comprar los Xiaomi Piston 3; pero el correo de mi pais es una tristeza y llevo un mes de esperarlos. Asi que, espero no terminar defraudado.
A ver qué te parecen, a mí desde luego me han convencido.
Cómo me molan estos posts…
🙂 ¡Gracias Uxío!
Magistral narración del típico proceso de compra de un Geek.
Los Pistons ya los tenía en mente en caso de necesidad, ahora me ha picado la curiosidad y por ese precio tal vez los compre para poder comparar, gracias por tu entrada.
Saludos.
Gracias FaloGalego 🙂 Lo cierto es que son casi como desechables por el precio, puedes probar y si no quedas estupendamente regalándolos…
Te felicito por la elección porque es imposible mejorar la relación calidad precio de esos auriculares. Otra opción para el que les interese, son los Xiaomi Pistons Hybrid, que por lo que dicen tienen unos graves más resaltados a costa de perder algo en los agudos, depende del tipo de música que vayas a escuchar claro.
Una cosa, yo estoy como tu con el Oneplus One y los pistons V3 y noto mucha pero mucha diferencia en función de la aplicación que utilice, hay algunas que no permiten ecualizar y la calidad de reproducción es bastante mediocre.
Uhm, lo de las aplicaciones parece curioso. Yo últimamente uso Stellio -y va bien- porque es compatible con Android Wear, pero habrá que probar otras.
Los IEM en cuanto se queman un poco tienen buenos agudos… lo que ocurre es que nada más sacarlos de la caja (que no es tan trabajada como la de los piston jeje) tienen unos bajos excesivamente golpeadores, pero luego con el tiempo (o con el quemado) toman balance y quedan increibles… lamentablemente muchos de los reviews son de probar y dejarlos, entonces se queda esta cosa fuera de balance como la primera percepción.
Estos también van muy bien.
https://www.amazon.es/gp/aw/d/B003V9M0VY/ref=mp_s_a_1_2?qid=1464962526&sr=8-2&pi=SX200_QL40&keywords=sennheiser+boton&dpPl=1&dpID=31T0uuy6hfL&ref=plSrch
Y te hubieras ahorrado 9 pavos…
Yo pasé de los MX170 a los Piston 3 (y después a los IEM), y hay mucha diferencia.
Desde luego desde mis Lidl-quality la cosa ha mejorado muy mucho, pero apuntado lo de los Xiaomi Hybrid. Tienen un buen análisis en Head-fi.org
http://www.head-fi.org/t/786589/xiaomi-hybrid-iem-thread-piston-successor
Bueno, estoy feliz aún así, pero gracias
Identificadísimo con tu post. Mi síndrome de corchopan empezó a curarse con unos Sony MDRE9LPH que me recomendó alguien por Twitter (de precio ridículo, por cierto aunque sin poder contestar al teléfono).
Ahora, aprovechando que le encontramos a mi padre un Xiaomi Redmi 3 por 127€ en gearbest compré Mi IV In-Ear Headphones Pro para los dos y estoy flipando con ellos, me encantan (Review en The Verge, Review en Android4all (español), Review de un ingeniero de sonido).
En cuanto a recomendaciones, yo suelo pasarme por geektopia antes de comprar. En sus recomendaciones de auriculares está el Piston 3.
Sólo una cosa, ¿son los falsos o los auténticos?……en los comentarios de Amazon más de uno se vanagloria de tener los verdaderos y que les ha costado hasta 3 pedidos…hablan de surcos en la parte del micro, que si un código QR, que si la junta del auricular in-ear….
https://www.amazon.es/product-reviews/B00W4Z7IGS/ref=cm_cr_dp_see_all_btm?ie=UTF8&showViewpoints=1&sortBy=recent
Ya nos cuentas….
Pues no lo he investigado, pero vamos, se oyen muy bien para lo que es mi oído corchopan. Tendré que mirarlo.
Genial, javi. Te vengo adviertiendo de que tienes pluma! (En el buen sentido, o en el malo, ya no se si se puede utilizar esta expresión )
Bienvenido a la calidad del audio. Sólo te falta algo de lo que ya hemos hablado antes: probar TIDAL!! Con esos «supercascos» ya puedes hacerlo.
y luego hablamos.
Gracias Pablo 😉 He pillado el sentido bueno, no te preocupes 😉 Lo de Tidal tendré que probar a ver, buena idea!!
Saludos
Yo también me siento muy identificado con el post. Soy un auténtico corchopan-man pero como el Lidl me queda lejos y viajó a menudo en Renfe, tengo cientos de auriculares rosas q todo el mundo dice q no se oye bien pero ahí sigo. Quizá deba atreverme a dejar de ser corchopan-man …
🙂 Ánimo Carlos, prueba a ver y me cuentas.
Que callado te lo tenías! Espero que te acuerdes de quién te los recomendó (un tipo instruido, sin duda). 😉
Me alegro de que te hayan gustado.
Pues ni me acordaba Trufeitor (al final fue mirando en foros, suponía que lo tenía en el subconsciente), ¡gracias! 😉
Hombre, los Kaiser 10 también tienen buena pinta, no te lo voy a negar, pero seguro que te has decidido por los Xiaomi porque los in-ear son menos aparatosos. La portabilidad es importantísima.
;P
Buenas,
Me habéis dado envidia y busco sustitutos económicos para mis Sennheiser MX170, pero no me convencen los «in-ear».
¿Alguna sugerencia?
He visto estos: https://www.amazon.es/Sennheiser-MX-375-Auriculares-bot%C3%B3n/dp/B0076Z7668/ref=sr_1_12?ie=UTF8&qid=1465326517&sr=8-12&keywords=sennheiser
¿Alguien tiene opinión de los auriculares óseos?
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Genial post yo pasé de los Sony económicos a Xiaomi Piston 3 que los compré por Ebay y resulto ser muy bueno, lástima que limpiando mi casa se engancho en un mueble y se estropeó. Decidí dar el salto al Hybrid de Xiaomi pero en realidad para mi son mejores los Piston 3, sin dudarlo. Saludos a todos