Sigo de cerca las noticias referentes a todo lo que rodea a la virtualización, y está claro que la evolución de las aplicaciones que parecían claras favoritas – VMware, Xen – se ha visto afectada por la entrada en juego de dos competidores muy distintos. Parallels en la plataforma Mac y KVM en Linux están demostrando que tienen muchas papeletas para ofrecer soluciones muy eficientes en este tipo de escenarios.
Eso sí, VMware se defiende con uñas y dientes contra Xen, y Xen hace lo propio contra KVM. Algunas de las perlitas con las que concluyen sus razonamientos:
The experimental results show that VMware ESX Server delivers the superior, production-ready performance and scalability needed to implement an efficient and responsive datacenter.
Xen is a true hypervisor, whereas KVM is a legacy virtualization solution akin to VMware Workstation, VMserver and Microsoft Virtual PC
Pero como venía diciendo, otras aplicaciones llegan pisando fuerte. Parallels anunció hace tiempo la existencia de su tecnología Coherence, que básicamente permite que las ventanas de aplicaciones Windows aparezcan en el escritorio de MacOS X. O sea, es como tener una máquina virtual «transparente» que permite cambiar de aplicación tanto si esta funciona bajo MacOS como si lo hace bajo Windows. Para que os hagáis una idea de esta maravilla, aquí tenéis un vídeo de YouTube
Pues bien, eso mismo parece lograr la combinación de Ubuntu con QEmu y la instalación de Windows XP como una máquina virtual. Aunque QEmu no es tan famosa como sus rivales, las capturas de la guía que ha aparecido en las propias páginas de Ubuntu demuestran que esta ‘coherencia’ es posible, y funciona. Obviamente hay muchas otras alternativas, como usar Wine, aunque si lo que quieres es que funcione IE6 o IE7 en Linux puedes usar el fantástico proyecto IES4Linux que automatiza el proceso de instalación de este navegador para que funcione perfectamente – basándose en Wine, eso sí – bajo Linux.
Sin embargo, otra posibilidad se vislumbra: la reciente presentación por parte de Linus del kernel 2.6.20 ha permitido dar entrada a la tecnología KVM (Kernel-based Virtual Machine), que se aprovecha de las extensiones hardware de los últimos procesadores de Intel y AMD para proporcionar una virtualización completa sin necesidad de núcleos modificados como era obligado en Xen hasta hace poco (Xen ya da soporte a estas extensiones y resuelve ese hándicap). Yo no he probado estos avances – porque no dispongo de un micro con esas características – pero desde luego cuando lo pille, a ello que me lanzo. Pero en Phoronix realizaron unas pruebas de rendimiento realmente interesantes. Y es que este mundillo avanza a toda pastilla.
wow que bueno!