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Basta ya, Sr. Trump

En la primavera de 1991 yo estaba terminando mis estudios de COU en un año absolutamente espectacular para mí. En junio acabaría haciendo la selectividad (ahora EvAu), que me saldría regular pero que aún así me daría acceso a estudiar Informática. Es lo que yo había querido estudiar desde casi siempre, pero en el centro donde estaba me dieron una sorpresa. Antes de la selectividad tenías que hacer una serie de pruebas psicotécnicas y una entrevista con un psicólogo-orientador con un objetivo: él te diría por dónde creía que debías tirar.

Recuerdo aquella entrevista muy bien. El psicólogo, afable y con cara de buena persona, hojeó mis pruebas y me leyó los resultados. «Pues según tus pruebas, deberías estudiar Económicas». «¿Económicas?», dije yo asombrado. «Ni lo había pensado, la verdad. Nunca me ha llamado la atención, yo siempre he querido estudiar Informática».

El tipo aceptó aquello con elegancia y con solvencia. Él estaba allí solo para orientar. Que tú luego tomases tu decisión era cosa tuya. Y desde luego, estudié Informática, para mi pesar.

Lo curioso es que no entiendo por qué me salió un resultado así cuando a mí jamás me interesó la economía. De hecho siempre he tenido estos temas cogidos con pinzas, aunque en los últimos años he ido comenzando a entender algunas cosas tanto por afición como por obligación. He aprendido algunas lecciones básicas pero importantes (invertir mejor que ahorrar) y he ido ganando un ligero pero sano interés por algunos temas económicos.

Pero lo que está pasando en el mundo no lo acabo de entender del todo. No nos iba mal con el capitalismo y la globalización. Al menos, no nos iba fatal. La gente a mi alrededor era, creo, razonablemente feliz —o al menos estaba razonablemente satisfecha— perteneciendo a esa clase media-alta aspiracional que se acabó comprando el Tesla (nope), viviendo en un miniresort burgués (yep) o convirtiéndose en campéon de pádel del barrio (yep).

Si en 2022 ganabas más de 44.000 euros, eras del 10% con más ingresos en España. Casi casi millonario. Fuente: El País.

Pero a los mandamases no parece que les acabase de convencer la situación. Desde luego no le convencía a Trump, al que le han llamado de todo. Sobre todo, loco. Yo mismo lo hice. Probablemente no lo esté. Quizás sea un genio bocachanclas, y por eso se lleva tan bien con Elon Musk, que es el rey del país de los genios bocachanclas. No sé.

Pero lo que está haciendo con los aranceles es muy loco. Como digo, no soy economista así que me pierdo un poco en estas batallas, pero es que no creo que ni los mejores economistas lo entiendan bien. Sobre todo porque las implicaciones de lo que está haciendo con los aranceles y con esa estrategia proteccionista es, en mi modesta y totalmente inexperta opinión, es cagarla. Que sí, que muy bien el make America great again, pero no si al mismo tiempo le haces la puñeta al resto del mundo.

En realidad Trump ya avisó en su primera legislatura. Ya le paró un poco los pies a China —que se ha aprovechado durante décadas de su dimensión y de ser la fábrica del mundo— y ahora quiere parárselos a todo el mundo porque la economía no es un juego de suma cero. Alguien sale perdiendo siempre, y aquí parece que saldremos perdiendo casi todos. Sobre todo, la inmensa mayoría de la población, a la que todo les costará más caro. Sally y yo nos tomamos el otro día un doble de cerveza y nos escandalizamos cuando nos cobraron cuatro euros por cada uno. Me temo que vamos a echar mucho de menos esos dobles a cuatro euros. Y los iPhone a 1,000, más. Y eso que yo (de momento) no compro iPhone.

Pero así están las cosas. Desatadas. Con las bolsas cayendo como solo lo han hecho un puñado de veces en la historia —y pinta a que caerán más— y con el mundo preguntándose qué pasa ahora. Porque esto es un peligroso dominó en el que todos van a intentar ir a la suya. Los equilibrios que existían eran delicados, pero ahora pueden derrumbarse, y si todos empezamos a hacer la guerra por nuestra cuenta —recemos porque solo sea comercial— va a haber, insisto, muchos perdedores.

No tengo ni idea de cómo va a acabar esto, pero la verdad es que no pinta muy bien.

No sé. Igual tenía que haber estudiado Económicas.

Maldición.

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2 comentarios en “Basta ya, Sr. Trump

  1. Lisardo dice:

    Dos apuntes:
    El primero sin importancia: ahora se llama PAU (prueba de acceso a la Universidad) desde que comenzó la LOMLOE, de la que se podría hablar mucho… y mal, porque está hecha por gente que nunca pisó la tiza. Si un día sacas el tema, o quieres un resumen, pidémelo (sí, soy docente).

    Respecto a lo que pasa en la economía, el Sr. Trump lo que quiere es volver a la negociación a dos bandas, país por país. Va de matón de instituto, pero intentando que de uno en uno, nos asustemos y negociemos bilateralmente. Hoy iba la presidenta de Italia para allá a negociar lo suyo. Igual consigue que a Italia le quiten parte de los aranceles, con lo cuál se puede abrir una espita peligrosa en Europa: que en vez de ir unidos, cada país intente el «sálvese quien pueda» y cada uno de los 27 tenga un acuerdo bilateral distinto. Y posiblemente, lo consiga. Ya vimos cuando las mascarillas en los primeros meses de la pandemia, que si nos aprietan mucho, cada país va a lo suyo y se olvida de ser solidario.

  2. Batlander dice:

    A mi lo de Trump me ha sorprendido porque es una burrada lo que ha puesto de aranceles. Y la formula que utiliza para sacar el porcentaje es una chorrada. Yo pensaba que pondria aranceles para presionar negociaciones, pero no tantos.

    De todas formas prefiero ser prudente y esperar unos meses a ver como termina la cosa. De momento ya he visto al presidente de Taiwan hablando de nuevos acuerdos con aranceles al 0%. Me parece que es una gran oportunidad para que de esta manera se baje mucho el impuesto a las importaciones. Pero claro, tienes que ser listo, como el de Taiwan o Meloni, que aprovecha para pedir menos «arnaceles» internos.

    Yo lo que tengo claro es que para el español medio, el «arancel» que lleva sufriendo desde hace lustros, y que no para de subir, viene de Bruselas y la Moncloa, no de Washington. Mismamente, la competencia desleal en temas sanitarios y arancelarios que se da desde Marruecos es vergonzosa. Asi que oye, igual esto hace que bajen los que mas nos afectan. Segun Trump el IVA es un arancel. No lo es, pero si consigue con esto que lo bajen al que habia hace 20 años seria espectacular.