Espectacular el 2020 que lleva AMD. Uno de darle la vuelta a la tortilla. O a las tortillas, ya puestos. La firma empezó fuerte con la presentación de los Ryzen 4000 para portátiles: de repente tenía mucho más sentido (al menos, para mí) comprar un equipo con uno de estos procesadores que hacerlo con alguno de los Intel de 10ª generación.
La superioridad de AMD en estos pasados meses en el ámbito de los ultraportátiles es manifiesta, y ya lo comenté en agosto al preguntarme cómo era posible que la gente siguiera eligiendo equipos con micros de Intel pudiendo optar a algun portátil similar con estos Ryzen 4000. Es cierto que hay muchos menos modelos disponibles, pero la oferta actual sigue favoreciendo —insisto, es mi opinión— la alternativa de AMD.
Esa situación podría cambiar pronto: los Intel Core Tiger Lake de 11ª generación tienen muy buena pinta en el apartado gráfico, así que puede que volvamos a tener una sana competencia en este mercado tan frenético de los portátiles. Ya hablaré más de esto en el futuro, pero en general mi recomendación es que si compráis portátil ni se os ocurra tirar a un Intel Core de 10ª generación: o compráis un Ryzen 4000 o esperáis a que lleguen los numerosos modelos ya anunciados con los nuevos Tiger Like.
Las cosas se han vuelto a poner feas para Intel esta semana. AMD ha presentado los Ryzen 5000 para PCs de escritorio, y lo han hecho con nueva arquitectura, una Zen 3 orientada totalmente a gamers, que es el mercado que ahora lo mueve todo. No hay análisis independientes, pero lo que indican los benchmarks internos de AMD es algo alucinante: por primera vez en una década (puede que más) AMD tiene el mejor procesador para gamers del mercado. El Ryzen 9 5950X de 16 núcleos es una bestia parda de 799 dólares que a priori parece que supera a la joya de la corona de Intel, el Core i9-10900K.
Eso era impensable hace un par de años para una Intel que lleva tiempo ya durmiéndose en los laureles y que no parece acertar en casi nada. Podría dar la sorpresa con los Tiger Lake, como digo, pero esta pelea la ha ganado AMD. La situación, de hecho, es un poco esta:
Espero que el fotógrafo Neil Leifer no se moleste por esta rápida adaptación de su célebre foto (Muhammad Ali vs. Sony Liston, 1965), pero AMD está que lo peta. No solo con CPUs, atención, porque también parece que va a plantar cara a la mismísima NVIDIA en gráficas, algo que parecía también impensable hace unos años.
Lo hará con las Radeon RX 6000, y aunque parece que no habrá competencia para ese monstruo llamado RTX 3090, sí que tendremos por lo visto una RX 6900 que podría estar más o menos al nivel de las RTX 3080. Si logran fabricar a buen ritmo y tener precios interesantes, amigos míos, estaremos ante otro bombazo de una AMD que no para de acertar.
No sé a qué espera Intel para reaccionar, pero me escama más que una empresa de esta dimensión y recursos no sea capaz de encauzar las cosas. Bob Swan, su recién estrenado CEO, no lleva mucho en el cargo, pero de momento no ha habido cambios radicales en una empresa que yo diría que necesita un golpe de efecto si no quiere quedar ahí, tumbadita en el ring. Me gustó el titular de ayer en PC World usando el célebre meme del ‘You had one job, Intel […]’ y ciertamente parece que a estos chicos se les está escapando el mercado entre los dedos. Y la culpa es solo suya, ojo.
Sea como fuere las noticias no pueden ser mejores para los usuarios: esta AMD no es esa segundona de tiempos pasados. A esta AMD parece haberle gustado eso de darle la vuelta a las tortillas.
Mola.
Lo gordo no es que los nuevos Ryzen sean unas bestias o que el tope de gama sea un 16/32, la serie 2000 y 3000 ya lo son, lo realmente importante es que por primera vez en varias décadas AMD ha puesto sus procesadores por delante de Intel en IPC (lo que es crucial para juegos) por un margen consistente además (entre un 5 y un 11%) y ha barrido las marcas de sus iteraciones anteriores (un 20% al menos sobre los 3o00). De propina ha arreglado los problemas de latencias y parece que los precios también van a acompañar. Antes había que elegir si orientar tu equipo más a la productividad o más al gaming, pero estos micros de AMD parece que apuntan a liderar ambos segmentos.
Si tenemos en cuenta que el mercado gaming de sobremesa tiene un perfil técnico y exigente por lo general, Intel se va a ver obligada a competir en precio, con lo que se avecina un invierno muy muy interesante. Habrá que esperar las reviews independientes, pero este puñetazo en la mesa parece que va a provocar un terremoto.
Tienen desde luego muy, muy buena pinta, y como dices el tema del IPC era su tradicional desventaja frente a los micros de Intel. La cosa promete, y sí, esto debería hacer que al final los usuarios ganemos por esa batalla tecnológica que también tendrá impacto en los precios.
A ver si no me equivoco en esto que voy a decir. El ipc significa instrucciones por ciclo de reloj y es una media que suele medirse teniendo los microprocesadores ejecutando tareas todos con la misma frecuencia de reloj. Que yo sepa el ipc de los micros ryzen supera a de los de intel desde la serie 3000, pero al final en rendimiento mononúcleo terminaba quedándose la corona intel al poder tener una frecuencia de reloj más elevada. Ahora no es que el ipc sea mayor que el de intel, es que ha llegado a ser tan alto que hasta compensa el tener una frecuencia de reloj más baja. Sea como sea, esto lo veremos el mes que viene cuando salgan y todo el mundo les haga sus pruebas correspondientes.
Yo el año pasado renové mi pc con un ryzen 3700x y lo junté con una 2080 founders y un monitor 1080p a 144hz, juego con mi pc bastante y no echo en falta esa pequeña penalización de rendimiento que hay si lo comparo con un intel de novena o décima generación hasta sabiendo que a 1080p mi micro tiene un handicap. Con estos nuevos ryzen 5000, amd ha terminado incumpliendo una de sus máximas ya que hasta habiendo conseguido batir a intel en cualquiera de los frentes, el precio de los nuevos chips excede a sus equivalentes de intel, cuando hasta ahora solían buscar garantizar un rendimiento similar a un precio más bajo. Todo esto al final se traduce en unas diferencias de 10-15 cuadros por segundo en los juegos cuando se ejecutan a resoluciones fullhd, diferencias que se reducen a la mínima expresión al subir la resolución. Si la gráfica es lo suficientemente potente para jugar a 1080p y alcanza en todos los casos 60 cuadros con un amd, no hay ninguna diferencia en la práctica a si la misma gráfica alcanzara 75 cuadros con un intel, eso en el caso que más favorece a intel ya que la mayoría del tiempo la ventaja es en realidad más pequeña que eso.
A mi entender, los de intel deben estar ahora mismo respirando bastante aliviados con estos microprocesadores del mes que viene porque haciendo símil con la foto de arriba, amd gana a los puntos pero no por KO ahora mismo, ya veremos que tal salen las gráficas.
Es una buena apreciación Pakolo, sí, la frecuencia de reloj siempre ha beneficiado a Intel en el IPC, y también es cierto que AMD ha subido precio ligeramente para los nuevos micros, pero yo creo que la apuesta que habían hecho hasta la fecha no funcionaba porque era una propuesta demasiado centrada en precio/prestaciones. No llamaba la atención por equilibrada que fuera. Aunque superaran en temas de productividad y multitarea por sus configuraciones multinúcleo, no molaban que en gaming fueran inferiores: con esto logran competir donde antes no lo hacían (tanto), y se muestran más ambiciosos.
Yo creo que es la estrategia adecuada. Veremos.
En noviembre veremos si brillan tanto como nos hacen ver desde AMD. También faltan por presentar precisamente los dos modelos que a priori deberían venderse más: el Ryzen 7 5700X y el Ryzen 5 5600, ambos de 65W de TDP. AMD ya dio tres veces en la línea de flotación de Intel (cada una de las generaciones de Ryzen) y parece que esta vez la apuesta es conservadora. Incluso parece que ha copiado a su rival el desarrollo «tick-tock» (Ryzen 3 con mejoras de arquitectura continúa con la fabricación en 7 nm de Ryzen 2 y Ryzen 4 saldrá en 5 nm).
Aunque claro, al otro lado del «ring» está el maestro de la propaganda, Intel, que si sabe mover sus hilos intentará hacer creer a muchos que los 50$ de aumento de precio de la nueva generación de AMD «pesa más» que los 100-150$ de más que cobraban los de azul en las primeras generaciones de Ryzen. Y, como siempre, los mayoristas españoles siempre acatan lo que digan los de azul.
La jugada de Intel ahora mismo es bajar precios. Ya tienen los 14 nm más que exprimidos (es más, sus Core 11XXX de sobremesa para principios de 2021 serán también a 14 nm) y tienen margen por ahí. Puede que AMD esté teniendo en cuenta eso y esperando que Intel se ponga a «rueda» por debajo para poco después del lanzamiento de los de azul pegarle un recorte en precio a los Ryzen 5XXX. Algo que se podrían permitir tranquilamente tras unas navidades siendo las «estrellas» del «gaming».
Quizás Intel tenga algo de margen, pero no demasiado ya. Al ritmo que va AMD, puede que en 2021 veamos otra vuelta de tortilla, ya más contundente, y con AMD dejando atrás a Intel.
Se pone interesante esto, desde luego.