Post breve que te pasas porque en realidad ya escribí ayer el que quería sobre este tema, pero para Xataka. Se trata, como habréis deducido del título, de una pequeña felicitación para los 50 añazos que cumplió ayer el lenguaje de programación BASIC.

Di en ese post algunos datos sobre mi historia con BASIC, y de cómo nada más entrar en la facultad el decano prácticamente lo despreció en aquella charla inaugural. Mis recuerdos son confusos, pero mi sensación es que hacer un comentario así de algo que ha influido tanto en tanta gente me parece de ingenuos, o de ignorantes. Por no llamarles de otro modo.

Como tanta gente de mi edad o que la ronda, BASIC fue una piedra angular en nuestra educación informática. Por supuesto que el lenguaje era una patata para la gran mayoría de escenarios, y por supuesto que había ya entonces alternativas muy superiores. Pero no tengo nada claro que me hubiera dedicado a la informática sin aquellos primeros programitas que me curré en BASIC en el Commodore 64.

Tan orgulloso estaba yo de aquel que sacaba medias, medianas y modas de las notas de la clase en EGB e incluso hacía unas grafiquillas ASCII (ni Excel, oiga) cutrillas con los resultados. Yo hice mis pinitos, pero algún día quizás cuente la historia de cómo mi padre –que no era informático– se pasó noches, y noches y más noches programando en BASIC una aplicación que acabaría implantándose –en otro lenguaje y con modificaciones, pero partiendo de aquel esqueleto– en la planta de producción del grupo PSA en Villaverde. Con un par.

Hay muchas más historias, y aunque me mola ponerme en plan abuelo cebolleta de cuando en cuando, tampoco hay que pasarse. Y en realidad el post no era más que una reafirmación de una felicitación que ya hice ayer y en la que insisto una vez más desde aquí. Felicidades BASIC. Que te quiten lo bailao.