Ayer leía un post titulado ‘Enough‘ –muy poético, yep– en el que el autor contaba una historia singular: la de un consultor que trabajaba muy duro la mitad del año, pero lo hacía para que justo en ese punto, con sus cálculos, ya tuviese suficiente para descansar los seis meses siguientes. El chaval se lo había montado bien, porque no necesitaba mucho más para vivir y porque tenía la suerte de tener trabajo esperándole cuando volviese a ponerse al tema. Le bastaba con lo del ‘enough‘.
La reflexión, claro, era la de si eso de trabajar solo lo suficiente para poder mantener cierto estilo de vida es buena decisión (o política). Son de esas cosas que dan que pensar, como lo de ver mundo mientras trabajas –revisitad el post, que mola– aprovechando que eres freelance. Qué envidia. Y qué pánico.
Será que por aquí andamos algo más apretados y quien tiene un trabajo tiene un tesoro, o será que lo de tener enanos realmente le pone a uno los pies en el suelo. El caso es que al final puede el rollo hormiguita. No es que viva para trabajar, desde luego, pero tengo claro que tal y como estás cosas hay que aprovechar las oportunidades y tratar de tener un colchón por si vienen mal dadas. Por supuesto, tanto el tipo del ejemplo como el autor del post están en una situación con algo menos de riesgo, y en cierto modo hasta pueden permitírselo.
Mira que me gustaría apuntarme, pero es que en mi caso ese título de post no sería «Enough«, sino, más bien, «Enough?«. Porras.
Actualización (14/04/2014): Muy bueno el comentario de Gaviot, que enlaza a un fantástico artículo gráfico, «The road not taken«.
Tener enanos hace que dejes de plantearte qué necesitas para vivir y te plantees qué puedes llegar a necesitar para que vivan ellos. Y nunca hay suficiente para lo que pueda pasar. Además, en este país, quedarte sin trabajo a determinada edad significa en muchos casos que tendrás que vivir de tus ahorros el resto de tu vida.
No es cuestión de obsesionarse, pero eso de vivir sólo para el presente sólo es válido cuando el único futuro que arriesgas es el tuyo.
Ahí le has dado. Totalmente de acuerdo.
Hola. Leyendo tus reflexiones no pude dejar de pensar en la interpretación que Zen Pencil hizo del poema «El camino no tomado» de Robert Frost. Los relacioné porque leyéndote me pregunto ¿por qué sería mejor el camino del «enough»? http://zenpencils.com/comic/60-robert-frost-the-road-not-taken/
Saludos.
Qué bueno, Gaviot, gracias por el enlace. Lo incluyo en el artículo si no te importa. ¡Saludos!