He tardado algo más de la cuenta, pero no ha sido del todo cosa mía: los chicos de Valve publicaron la primera versión beta de SteamOS con varios requisitos algo singulares. El más absurdo de todos ellos, la necesidad de instalarlo en un equipo con UEFI. Y es absurdo porque ese requisito era y es propio de Windows, y ya hubo bastante revuelo con el tema entre las distros Linux que tuvieron que buscar soluciones ya que ninguna de ellas estaba inicialmente preparada para ofrecer ese soporte cuando apareció Windows 8.
Había otros problemas, como el hecho de que la imagen estándar de instalación con el proceso automatizado se cargaba todos los datos de tus discos duros. No solo aquel en el que instalases SteamOS, no: todos los que estén en ese momento conectados, por lo visto, desaparecían del mapa. El proceso «avanzado» parece que ofrecía más garantías e incluso comenzaron a aparecer algunas ISOs y o métodos orientados a poder particionar manualmente –en The Linux Cauldron se han mostrado especialmente activos con esto–. Pero lo importante era contar con una imagen ISO funcional que se saltara el requisito de la necesidad de tener UEFI .
Sobre todo para mi, porque solo podía probar SteamOS en mi HTPC, que ahora ha perdido algo de su sentido (tanto el Raspberry Pi como el Chromecast se portan) y que era un buen candidato para las pruebas. Pero se trata de un equipo antiguo en todo, con una Radeon 6450 con puerto DVI y HDMI como gráfica –SteamOS recomienda solo NVIDIA, aunque tanto los chips gráficos de Intel como los de AMD funcionan– y me esperaba problemas. Y los tuve. Los procesos para instalar sin UEFI no pirulaban, y solo lo conseguí tras bajarme una ISO (creo que fue esta pero ya no estoy seguro) que finalmente funcionó tras grabarla en un CD (con los USB no había forma).
El proceso de instalación fue sencillo… para alguien que se ha instalado unas cuantas distros en su vida. Como decían los de SteamOS, esto no es moco de pavo para noveles, así que si no habéis hecho algo similar, yo no os lo recomendaría. El proceso de post-instalación es igualmente confuso: hay que entrar primero en una sesión GNOME como usuario «steam» (y el mismo password), para instalar el cliente de Steam real y luego salir de la sesión para entrar de nuevo con usuario (y pass) «desktop». Eso permite ejecutar un script de post-instalación que lo deja todo preparado para reiniciar y, por fin, arrancar con la sesión SteamOS que ofrece la interfaz que ya se ha visto en unos cuantos vídeos.
A mi, como era de esperar, no me funciono ni eso. Logré iniciar el tema desde una sesión GNOME con el usuario desktop, y luego iniciando desde un terminal la llamada steamos-session. La configuración fue bien, el sistema cogio mi cuenta de Steam y mis juegos, pero el rendimiento era bastante patético. La Radeon 6450 no es una tarjeta para jugar, y se notó. De hecho toda la configuración estaba cogida con pinzas y iba de todo menos suave, incluido Portal, que con las opciones al máximo se movía con un lag terrible. Mis pruebas con mi mando inalámbrico de la Xbox 360 también fueron un fracaso: instalé el paquete xboxdrv (aunque según los comentarios de varias fuentes, debería haber funcionado de serie), y aunque en la terminal el mando respondía, una vez en la interfaz de SteamOS ni flowers. Por cierto, no entiendo porqué en Valve decidieron quitar los repos estándar de Debian, pero es un problema fácil de resolver.
Las conclusiones son claras: mi primera experiencia con SteamOS ha sido una pequeña gran castaña, pero claro, no cumplía los requisitos hardware y eso no facilita las cosas sobre todo con una imagen aún en pleno desarrollo. Si queréis probar este invento os recomiendo: 1) que lo hagáis con hardware soportado (y medio potentillo), 2) que si solo queréis echarle un vistazo, lo instaléis vía máquina virtual, o 3) que si tenéis una Ubuntu instalada, os instaléis la interfaz de SteamOS tal y como explican aquí.
Por supuesto, eso no impide que mantenga mi opinión sobre SteamOS. Es un excelente principio, y la interfaz tiene muy, muy buena pinta. Como dije en algún lado –ya no sé si aquí o en alguno de los Xatakas– veo a SteamOS como el nuevo Android de los PCs reconvertidos a centros de ocio en el salón. Y si no, al tiempo.
Yo conseguí hacerlo rular en VirtualBox, porque mi PC lo de UEFI va a ser que no. Está muy muy verde por ahora, pero pinta increíblemente bien.
Pude probar, aunque fuera a paso de tortuga debido a ser en virtual, el interfaz steam, y me gustó bastante. Parecía sacado de cualquier consola de nueva generación.
Cuando haya una versión estable (Que por fin admita el jugar al televisor vía streaming como prometían), y pueda meterle los retoques de los repositorios y tal, sin duda terminará sustituyendo a mi actual Ubuntu, del cual ya estoy un poco cansado.
La experiencia que tuve con Steam bajo Ubuntu en mi portátil no fue muy positiva… Espero que SteamOS sea más fluido con el viejo hardware.
Pues a mi que cumplía los requisitos me ha encantado sigo probando visitas como integrar juegos wine y xbmc y como lo consiga sera mi nuevo mc principal ja ja ja la cosa esta promete.