Aunque la empresa de Cupertino siempre ha tenido ese halo elitista, su apertura (casualidad que me haya salido esta palabra) a otros mercados y, sobre todo, a usuarios de Windows, ha difuminado en parte esa imagen. A finales de los 80 y buena parte de los 90 Apple fue considerada como la alternativa evidente para profesionales del diseño. Su interfaz gráfica y la existencia de aplicaciones como QuarkXpress lo hacían casi imprescindible en DTP (DeskTop Publishing), una división presente en cualquier publicación impresa y empresas relacionadas con el diseño gráfico.
Aunque se ha mantenido esa relación, la entrada de los de Jobs en el mercado de la electrónica de consumo (con los iPods), y la llegada de MacOS X permitió mucho más por lo mismo: de ahí que su romance con tareas de diseño pareciera algo menos evidente. Sin embargo, esa sociedad (Valdano dixit) ha vuelto a renacer con la llegada de una aplicación pensada por y para los profesionales del diseño, y más estrictamente, para los fotógrafos más exigentes. Hace apenas 6 horas estaba con algunos profesionales más del sector atendiendo a una presentación «en diferido» (ya habían anunciado el pasado miércoles 19) del nuevo lanzamiento estrella de Apple. Aperture es una aplicación de postproducción fotográfica realmente eficaz que por lo que hemos podido ver tiene muchos visos de convertirse en imprescindible para fotógrafos profesionales. De hecho, el lema de la aplicación lo dice todo:
RAW as easy as JPEG
Para los interesados en esta aplicación os recomiento pasar por su presentación en las propias páginas de Apple. A buen seguro en noviembre (cuando aparezca definitivamente) tendremos más de un análisis de la misma, y aunque como siempre la gente de Apple vende frigoríficos hasta a los esquimales, existen algunos puntos que harán reflexionar a más de uno antes de la compra. En primer lugar, la aplicación está orientada a mercados high-end (es decir, lo más de lo más), así que para usarla necesitarás un maquinón. A ser posible, uno de los nuevos Power Mac G5 Quad, que por 3300 euros (lamentable que sólo incluyan medio gigabyte de memoria) se convierten en los verdaderos caballos de batalla de Apple. Los primeros Mac con PPC de doble núcleo, y mucho me temo que si no son los últimos, poco les faltará. Además de este primer punto, hay que tener en cuenta que Photoshop siempre estará ahí, y que aunque ahora mismo el trabajo con imágenes RAW no sea tan claro como Aperture, no creo que tarden mucho en lanzar algún tipo de actualización en este sentido… y os aseguro que hay mucha, muchísima gente acostumbrada a trabajar con esta herramienta y que será reacia a cambiar a Aperture. Por último, un detalle ñoño pero que me ha extrañado: en esta aplicación disponemos de un apartado de impresión que nos permite diseñar nuestro propio álbum de fotos con plantillas a lo MyPhotoFun (qué gran idea la de estos chicos), pero me extraña encontrar algo así en una aplicación dirigida a profesionales de la fotografía… y es que yo creía que teóricamente estos recurrían a servicios muy concretos de impresión de sus resultados. Aún así, queda cuco, pero esta herramienta en particular sería la mar de bien recibida por multitud de usuarios finales.
Javi, no tendrás por ahí alguna buena comparativa entre Photoshop y Gimp?
Hola Roger… pues no, y la verdad es que no conozco ninguna… El problema esencial de GIMP residía en su soporte para CMYK, pero creo que se había solucionado con un módulo. Salvo por esa diferencia importante, prácticamente todo lo que puedes hacer en Photoshop también lo puedes hacer en Gimp… aunque no soy un experto!
Si encuentras algo, avisa! 😉
Saludos
Hombre, todo todo todo, lo que se dice todo, no creo. Yo no he utilizado el GIMP en mi vida, pero creo que ese pastón que hay que dejarse para adquirir una licencia de Photoshop, no será únicamente pos su soporte CMYK no? O sino preguntémosle a Pablo si hay diferencia…jeje
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