Hace tiempo que no vengo aquí a hablar de mi libro, así que como este es mi blog y puedo elegir tema, me voy a poner en plan Paco Umbral. Ea.
Y esta vez quería hablar de una de las decisiones clave a la hora de publicar, que es cómo hacerlo: si intentando contactar con una editorial o autopublicando el libro por tu cuenta. Como sabéis, yo elegí la segunda opción. Lo tuve claro desde el principio porque temía que iba a vender poquito y al menos así yo me llevaba algo más por el esfuerzo, pero también porque me gustaba la idea de poder hacerlo yo mismo.
¿Ha sido la decisión correcta? Imposible saberlo, pero diría que sí. De hecho, cuando más leo sobre editoriales y el negocio de la literatura, más claro tengo que ganar una cantidad decente dinero con un libro es casi muy difícil. Vivir de él, una utopía.
Pero es que incluso lograr que te lo publique una editorial es complicado. Quizás para alguien conocido y con cierta experiencia en el segmento las opciones suben un poco. Yo ni lo intenté, si os soy sincero. No tenía ningún contacto en ese sector, y no tengo nada claro que esa opción me hubiera rentado. No me apetecía mucho intentar (¡ja!) vivir de mi libro, ir a eventos, mesas redondas y presentaciones varias: no creo en esa estrategia, y tengo claro que las editoriales quizás hacen un esfuerzo inicial con un libro, pero tienen otros 1.000 con los que trabajar y que hacen que eso de estar en escaparates y bien visible en tiendas y librerías esté solo reservado para los superventas. Es una lucha perdida.
En El País hablaban hace unos días sobre esto. El título era contundente: «Avalancha de manuscritos no solicitados: la literatura paralela que nunca llega a publicarse«, y en el texto se explicaba cómo las editoriales sencillamente no dan abasto porque no paran de recibir novelas y ensayos de escritores noveles que se creen los próximos Follet, Pérez Reverte o Allende. Nos hemos vuelto todos la mar de creativos, y todos creemos que nos podremos ganar la vida con nuestra novela, que es una absoluta genialidad y nadie se da cuenta.
Suscriptocracia lo es, desde luego. Una absoluta genialidad de la que (casi) nadie se da cuenta.
Sea como fuere, la gente que trabaja en esas editoriales tiene claro que somos (casi) todos unos ilusos. María Fasce, directora literaria de Alfaguara, Lumen y Reservoir Books, lo explica:
«Recibimos todo el tiempo manuscritos, ya sea por la web, por mail o físicamente, folios encanutados. Algunos hasta diseñan la cubierta, como para ahorrarnos trabajo. O mandan su libro autoeditado, como si eso aumentara las posibilidades de ser seleccionado».
Efectivamente, quienes lo hacemos todo creemos que el libro no está nada mal. Yo mismo, que llevo escribiendo durante 25 años, estoy seguro de que es así. ¿Sabéis qué? Probablemente esté totalmente equivocado. Nunca lo sabré, pero probablemente la redacción es mejorable, la edición es un desastre y la portada es de principiante total. ¿Pero sabéis qué?
Que soy feliz porque he publicado un libro.
En España compito con mucha gente: al año se publican 90.000 títulos al año, y aunque no puedo saber realmente cómo me va respecto al resto, suelo mirar la clasificación de los más vendidos en Amazon para saber cómo voy por ese lado. Ahora mismo —hoy ha sido un día estupendo, he vendido más de lo que esperaba— estoy el 15.448 en la clasificación global. Creo que en el mejor momento estuve más o menos el 1.000, pero ya no lo recuerdo.

Es normal que con el paso del tiempo las posiciones vayan subiendo y sobre todo bajando, y aquí he aprendido una importante lección: hay que ser pesado con los lectores y recordar de cuando en cuando que tienes un libro y que se lo compren, que van a disfrutar de una experiencia que nadie definió mejor que Enrique Iglesias (no me deja incrustar el vídeo, leñe).
El tema de El País incluye una entrevista a Miguel Alcázar, que fue lector externo para editoriales y que acabó escribiendo un libro este tema titulado ‘Manuscritos no solicitados‘. Él mismo daba una conclusión bastante buena para el mundillo, tanto de quien los lee como primer filtro como de lo que llega a las tiendas: «Los manuscritos que llegan suelen ser aburridos, o normales, o mediocres… Pero eso no es muy diferente de la mayoría de lo que se publica»
Hay por supuesto algunos géneros que son especialmente populares. Mi compañero John Tones, que ha escrito varios libros de terror y es bastante más conocido que yo en el mundo literario, publicó hace poco un tema sobre el declive de la ciencia ficción. Ahora lo que se lleva es el romantasy, muy popular entre los jovencitos. Si lo sabré yo: mi hija, ávida lectora, no para de leer de estos. Por cierto que hace poco le dije que de cuando en cuando debería leer también algo con un poco más de menene. ¿Sabéis qué hizo? Se puso a leer ‘Suscriptocracia‘. Amor total.
No sé qué le parecerá, pero lo que es seguro es que no lo habría leído si no lo hubiera autopublicado. Veo casi imposible llegar a publicar con editorial salvo que seas alguien con un perfil potente—y eso en España, en EEUU mejor no hablar—, y yo, como digo, soy feliz habiendo publicado por mi cuenta.
Aquí toca hacer dos peticiones.
- Si me habéis leído y os ha gustado mucho (si no no hace falta, de verdad) dejad vuestra valoración en Amazon. Ya sabéis como es nuestro mundo: la gente se mete en el bar donde hay más gente, aunque el bar sea una castaña.
- Si no me habéis leído, no sé qué esperáis. ‘Suscriptocracia‘ está a al menos el 30% de su precio original:

- eBook Amazon: 6,99 euros (estaba a 9,99)
- Tapa blanda Amazon: 14,99 euros (estaba a 21,83)
Lo que os decía. He venido aquí a hablar de mi libro 😉
Has salido varias veces en la tele hablando de tu libro.
De esto deduzco que deberías estar un peldaño más arriba que la media.
Con esa carta de presentación lo mismo sucede algo ‘mágico’. Podrías por lo menos intentarlo.
Tengo un dicho que aplico a mi mismo todo el rato: ‘que no digan que ni siquiera lo intentaste’.
Suerte. 🙂
Con el libro ya publicado es aún más difícil. Dicho lo cual, tras lanzarlo sí inicié el proceso de envío de manuscritos con un par de editoriales por si las moscas. Cero noticias desde entonces. Intentado está 🙂
Javi me alegro de haber sido uno de los primeros en haber comprado el libro (ya no te digo de la gratificción por su lectura). Porque así te he ayudado, como así llevo haciéndolo hace años, en que cuando te tomes una cervecita junto a Sally, sentados en las tumbonas del miniresort puedas decir: Va por vosotros !!!!.
Creo que si lo comprase ahora, solo te daría para un cafe solo.
Muchas gracias José María 🙂 Di que sí, me alegro de que te gustara! Ahora me llevo algo menos, sí, pero sigue dando para una cervecita. Salud!