Un año más. O menos, claro. Según se mire. Lo digo con pesar: ha sido un año este con sus luces y sus sombras, como todos, pero diría que todas ellas han pasado más rápido que de costumbre. A 2x. Recuerdo perfectamente el momento en el que escribí este mismo post el año pasado y de repente parece mentira que hayan pasado 365 días. Y lo han hecho. Como un suspiro, chavales.
Casi todo, como digo, bueno. Mis niños siguen iluminando todos esos días y mi mujer sigue a mi ladito, bien cerquita. Lo mismo con la gente que me importa, familia y amigos, con los que seguimos riendo, gritando y sufriendo (un poquito) —que de todo hay—, algo que espero sigamos haciendo muchos años más. Y como decía alguien con esa sabiduría invisible, todos seguimos poniéndonos los calcetines sin hacer muecas. Incluso nos da para hacer algunos saltos del tigre y todo.
Eso, creo, es lo que importa. Todo lo demás son minucias. Como dije hace unos meses, se trata de perspectivas. Me podría poner a contaros qué tal me ha ido en lo profesional, en lo personal o montarme un resumen de lo que ha sido 2019 para el blog, pero prefiero no enrollarme mucho.
Solo quiero dar las gracias y desearos feliz salida y mejor entrada de año.
Por un 2020 estupendo. Uno con muchas risas, con muchos gritos y con menos (o nada) de lo otro.
Y uno que se pase un poquito más lento. A 1x estaría bien, por favor.
Feliz 2020.
Imagen | Unsplash
Feliz día de Año Nuevo, Javier! Esperemos un año propicio para todos?
Y sí, sí que ha pasado rapidito…
Esperemos que sí. Abrazo y feliz año Lambda 🙂
Feliz año, Javipas. Siempre un año más. Y siempre bueno. Abrazo gordo.
Ojalá lo sea Uxío, abrazo grande para ti también.