Hoy paso de despotricar -y tengo motivos para ello después de un evento de prensa el que podría escribir una novela corta- y dedicaré este pequeño post friqui a esa pequeña maravilla llamada Raspberry Pi 2 que lleva ya algunas semanas con nosotros y que va mostrando algunas de sus renovadas prestaciones gradualmente.

Una de ellas, la de poder convertirse en toda una Steam Box de apenas 35 dólares. O lo que es lo mismo: si tenéis una NVIDIA GeForce compatible con GameStream podréis ejecutar los juegos en el PC, pero disfrutarlos, por ejemplo, en la tele del salón. En realidad no se utiliza GameStream, sino LimeLight, una implementación Open Source de esa tecnología. El resultado es casi mágico.

Los chicos del recién estrenado Possibly Unsafe -Patrick Norton es un viejo conocido de este tipo de programas, lo hace muy bien- han publicado un vídeo en el que muestran cómo poner en marcha todo el montaje, que en realidad es bastante simple para cualquiera que haya manejado una RPi2.

Basta con activar la tecnología GameStream en nuestro PC con la gráfica NVIDIA, para luego configurar alguna cosilla en la Raspberry Pi 2 en la que conviene tener una Raspbian preinstalada. También hay que toquetear un poco para configurar el mando e incluso nos enseñan cómo configurar una pequeña aplicación para Android que permite lanzar el script que lo pone todo en marcha (y que hace uso de java) cuando lo necesitemos.

Todo muy friqui pero sin historias demasiadas complejas, y desde luego el resultado final es espectacular. Yo no tengo ahora mismo una gráfica compatible (maldición), pero desde luego esta es una razón más para comprar una Raspberry Pi 2. En Amazon está por 44,87 euros, y aunque se puede encontrar algo más barata, si sois usuarios Premium los gastos de envío gratuitos lo compensan casi del todo. Estáis tardando, chavales.