Y es que hoy es el día de los friquis, así que en muchos blogs se ha hecho referencia a este fenómeno, difícil de definir sin que uno resulte algo peyorativo. Yo diría que no llego a la categoría absoluta, pero está claro que algo de friqui tengo, porque me encantan los cacharritos, me paso un montón de horas delante del ordenador (y no exclusivamente por trabajo) y he tenido pequeñas fiebres friquis de coleccionismo. Eso sí, no llego ni de lejos a la altura de los friquis auténticos, esos que se disfrazan para los estrenos de las pelis de culto (Star Wars, Star Trek, El Señor de los Anillos, Serenity, Matrix, y un largo etcétera) o que se gastan todo su sueldo en figuritas, cromos, DVDs de edición súper limitada, o cómics de todo tipo.

Así que mi enhorabuena a todos los friquis por el día de hoy, que les hace justicia porque la dedicación que estas personas tienen es realmente asombrosa. Y para comprobar rápidamente mi nivel friqui me he leído el pequeño manifiesto friqui que han publicado en la página del Orgullo Friki, y que seguro que trae cola 🙂 Según el mismo, la verdad es que muy friqui no soy. Me gusta el fútbol, no estar todo el día en casa, y eso de reunirme con gente muy friqui me asusta, que hay gente mazo rara por ahí 😉