Quién nos lo iba a decir hace unos años. Lo de que por 150 euros íbamos a tener un móvil de lo más solvente, digo.
Es lo que he podido comprobar tras trastear unos días con un Cubot P20, un smartphone tan modesto como solvente. De hecho sus especificaciones son discretas pero muy decentes:
- Pantalla: 6,18 pulgadas LCD IPS FHD+ (2.246×1.080 px), formato 19:9, 403 ppp, y claro, con notch.
- CPU: MediaTek MT6750T (28 nm, 8 cores Cortex A-53 a 1,5 GHz), Cat. 6 LTE, GPU ARM Mali-T860 MP2. Se anunció hace dos años, así que ya tiene su tiempo.
- Memoria: 4 GB RAM
- Almacenamiento: 64 GB ampliables vía Micro SD (Dual SIM o SIM+Micro SD)
- Batería: 4.000 mAh
- Cámara trasera: dual 20+2 MP f/2.0
- Cámara frontal: 13 Mpíxeles
- Conectividad: WiFi 802.11ac (2.4GHz), BT 4.0, Micro USB
- Otros: lector de huella trasero, GPS, radio FM
- Precio: 149,93 euros en GearBest
Cierto, no es un tope de gama, pero con ese precio no podemos esperar mucho más. De hecho sorprende contar con un diseño aparente, notch incluido. No hay opción en la configuración para ocultarlo permanentemente, pero curiosamente sí se oculta de forma automática en ciertas aplicaciones no adaptadas para que saquen provecho de esa muesta.
Ese pantallote hace que el móvil sea grande (156,25×75,25×8,5 mm), pero no especialmente pesado (167 g). Como ocurre con otros fabricantes, aquí Cubot ofrece una carcasa de silicona transparente para proteger el móvil (la carcasa es de plástico, lógico) e incluso hay protector de pantalla precolocado para evitar sustos. Que por ellos no quede, desde luego, y me parece un buen detalle.
Es curioso cómo en móviles más baratos tenemos opciones que muchos pediríamos para los gama alta. Por ejemplo incluye puerto de auriculares, pero también radio FM si queréis aprovecharla. Más curioso es la inclusión de un conector Micro USB para cargarlo y conectarlo al PC, y aunque no hay soporte de carga rápida, la buena noticia viene por la capacidad de su batería, que con sus 4.000 mAh es una pequeña maravilla, sobre todo teniendo en cuenta que sus componentes no son demasiado exigentes.
Esa es precisamente una de las notas destacadas del teléfono: su procesador no impone demasiada carga, y aunque la pantalla sí lo hace un poco más lo cierto es que me he encontrado con que nunca he tenido que cargarlo al acabar el día: o me ha durado dos días si no lo he usado de forma súper intensiva, o si lo usaba más me pedía el cargador al día y medio. Fantástico en este apartado, sin duda.
Al usarlo, claro, hay ciertos sacrificios. El sensor de huella situado en la parte trasera no es el mejor que he visto en mi vida: responde, pero no tan bien como el de otros dispositivos. Tengo que probar a escanear el mismo dedo más de una vez (el truco funciona en otros dispositivos), pero aunque no es preocupante sí que es un poco molesto en según qué ocasiones.
La cámara, por cierto, se porta bastante bien. Siempre comento cómo cuando uno paga un plus por el móvil lo que está pagando habitualmente es una cámara mejor, y aquí es evidente que no vamos a contar con lo más de lo más, pero el Cubot P20 resuelve. La aplicación nativa de cámara es algo lenta en lo de cambiar de modo (el modo retrato aquí se llama Blur, o al menos yo no encuentro el modo Bokeh que sí aparece en la información promocional), pero una vez seleccionas el modo el disparo es bastante rápido (no instantáneo, desd eluego) y el resultado es muy aparente sobre todo con buenas condiciones de luz.
La cámara sobreexpone algo más de lo deseable cuando disparas sin más (se nota en los ejemplos), así que hay que tener cuidado y es recomendable ajustar bien la exposición un poco (basta con cambiar el punto en el que enfoca tocando la pantalla hasta que das con la buena), pero es cierto que en contraluces y cuando hay mucha luz hay que controlar esto. En baja luminosidad, lo de siempre. Aquí salen los pecadillos de casi todos los móviles incluido mi Xiaomi Mi 6, y el Cubot P20 no es una excepción. Sea como fuere, el apartado fotográfico y de vídeo está bien resuelto, y lo cierto es que sorprende que para un móvil a este precio los resultados finales sean tan simpáticos.
Me gustó también ese aprovechamiento de pantalla: puedes ocultar la barra de navegación, lo que permite que por ejemplo al usar el navegador el espacio visual sea máximo y ocupe casi todo el frontal. Ver más siempre es mejor, y aquí se nota que eso, como esperaba, mejorase la experiencia de uso. El móvil llega con Android 8.0 sin bloatware, toda una sorpresa, y salvo el gestor de actualizaciones del firmware y un explorador de archivos, están unas pocas apps por defecto de Android y para de contar.
En reproducción multimedia, también buenas noticias: el sonido de los altavoces (orientados hacia la parte baja) es decente pero mejor no lo subáis mucho que distorsiona, y lo que se disfruta es nuevamente lo de ver los vídeos a pantalla completa, que por ejemplo con YouTube no aprovecha esa franja superior del notch para que no perdamos información. Buena solución para no andar empeorando la experiencia, sin duda.
En rendimiento tampoco he notado grandes desventajas con respecto a los grandes del momento. Es cierto que la cámara se beneficiaría de un mejor procesador (y de OIS, pero claro, no se le pueden pedir peras al olmo) y que también ganaríamos en fluidez, que no es en absoluto mala, pero en general el comportamiento es, como digo, sorprendente. Si me hubieran dicho que esto costaba el doble me lo hubiera creído sin problemas, y aquí supongo que ese diseño todo pantalla engaña, porque parece algo como reservado a móviles mucho más caros y resulta que la moda se ha extendido y ha conquistado a modelos de las gamas de entrada y media sin problemas.
¿Conclusiones? Pues estupendas. Salvo por echar de menos una aplicación de cámara algo más fluida y rápida en sus tiempos de reacción, lo cierto es que este Cubot P20 resuelve en casi todo lo que necesito. Me mata un poco la falta de NFC porque ya soy uno más de la tribu de los pagos móviles, pero oye, es que este Cubot P20 cuesta 149,43 euros en GearBest. Nada mal.
Pero nada mal, oye.
A ver cuándo se pasa la moda esta del notch, porque como bien dices, está infectando todas las gamas.
Y un apunte respecto al mi a2 que recomiendas, ya comenté en su momento que la mayor pega que le veía al teléfono era el precio y que por el natural devenir de las cosas en tecnología sufriría un ajuste más pronto que tarde. Ha sucedido incluso más pronto y más fuerte de lo que se pudiera prever convirtiéndolo el una opción atractiva e interesante.
Pues sí. A estos nuevos precios que está apareciendo empieza ya a ser curiosete.
Aunque siempre es bueno barajar diferentes opciones, 150€ a través de Gearbest también dan para un Xiaomi S2 en la tienda oficial, aunque sin muesca por supuesto: https://www.mi.com/es/redmi-s2/specs/
El otro día pude tocar uno unos instantes, el propietario no tenía queja alguna y creo que también es una gran opción en esa franja de precios, desde luego. Bien por el apunte Land, gracias.
Es que el SD 625 es como los viejos rockeros, que nunca mueren XD
De todas formas yo aconsejo subir un escalón e ir directamente a por el Xiaomi Redmi Note 5. El salto al SD 636 se nota y la diferencia de precio es muy reducida (siempre hablando de la tienda oficial o de los importadores «patrios»).