Aunque vuelvo al tema una vez más (bueno, yo y todos), en esta ocasión lo hago desde otra reflexión, la de Dustin Curtis, que en su blog en Svbtle ha publicado un post titulado «Replacing the PC». En el texto el chico habla de algunas estadísticas de Pew Research (PDF) en las cuales se divide la cuota de uso de tablets en rangos de edades:
- 16%: 15-20 años
- 18%: 20-29 años
- 25%: 30-55 años
Curioso, efectivamente, que la población algo más mayorcita sea especialmente adepta al uso de los tablets (aunque la diferenciación de rangos de edad marca adrede ese aspecto). Para muchos el tablet debería ser suficiente. Este tipo de soluciones es candidato perfecto a sustituir a un PC en muchos escenarios, y sin embargo, las ventas de estos productos parecen haber llegado a un punto de madurez claro, como mencionaba en el análisis sobre el iPad en Xataka.
A mi los tablets no me resuelven ningún problema, y jamás he tenido uno, pero entiendo que sí es el caso de millones de usuarios que, de hecho, probablemente sigan nutriendo ese mercado durante algún tiempo más. Pero no mucho. La razón, como explicaba Curtis, es que las generaciones que vienen no han crecido con un pan bajo el brazo, sino con un móvil (negritas mías):
Young people are growing up on the mobile phone as their primary computing device, which has fundamentally changed the way they use and think about the internet. Tablets are simply unnecessary for them, because the mobile phone doesn’t offer a degraded internet experience, like it does for adults: it is the internet experience.
Importante esa última conclusión. Para los más jóvenes la única experiencia en Internet que valoran es la que tienen en sus manos, o mejor dicho, en sus móviles. Con pantallas cada vez más pequeñas en tablets (tamaño medio este año 7,1 pulgadas, por las 7,8 del año pasado) y más grandes en móviles (4,9 pulgadas este año, 4,5 pulgadas el anterior, maldición) hay signos evidentes de que hay una convergencia de tamaño y prestaciones evidente. La pregunta, como apuntaba Curtis en esa reflexión es obvia:
why carry both a small-screened and a large-screened device–both of which are otherwise essentially identical–when you can pull out your mobile phone and have a screen that, for example, expands to tablet-size when you stretch it?
Así es. No parece tener sentido tener dos dispositivos cuando uno puede cubrir las necesidades de ambos casos de uso con suficiente calidad. Y ahí es donde este chico apostilla su reflexión afirmando que el tablet es simplemente un paso intermedio que por ahora soluciona los problemas de batería y pantalla de los smartphones. Pero, concluye, «no habrá tal cosa como un tablet en el futuro».
Concuerdo a tope con esa reflexión, y le sumo, como siempre, la idea de la convergencia que hará que el móvil acabará proporcionando una experiencia «responsive» cuando lo conectemos a un monitor y necesitemos trabajar como está mandado. Eso aún tardará, y veremos quién llega primero, pero es algo que por ejemplo comentamos ayer en el segundo debate en directo que hicimos en Xataka, esta vez dedicado a Windows Phone. Ahí os dejo el vídeo.
El tablet, para mi, es un dispositivo de sobremesa. Algo para tener en la mesita del salón y leer el periódico, consultar la cartelera, etc. No es un dispositivo portatil aunque a veces me lo llevo en el metro (para continuar viendo una serie a la que estoy particularmente enganchado) o me lo llevo de viaje para que cumpla con la misma labor que hace en casa. En estos aspectos y, si puedes permitírtelo, es complementario con el móvil porque el periódico o una serie se ven mucho mejor en 10 pulgadas que en 5.
Desde luego que se tiene que ver mejor, estoy de acuerdo. La reflexión es precisamente la de que mucha gente comenzará a valorar si compensa o no cuando cada vez las diagonales de tablets y smartphones se acercan más. Yo creo que esa valoración hará que los tablets acaben perdiendo un poco su sentido para la mayoría de usuarios.
Aún así, coincido en algo más: de meterlo en un saco, en mi caso lo metería como dispositivo de sobremesa. No descarto para nada ese hipotético Microsoft Surface Pro 3 como equipo portátil/sobremesa/viajes en el futuro. Veremos, veremos 😉
Pués yo a mis casi 16 años navego por la Web en el PC, en el móvil ne es incómodo. La Tablet en mi opinión no sirve para nada, hace lo mismo que un smartphone. Las phablets y smartphones son el futuro, la tablet está condenada a desaparecer poco a poco.
En mi casa el tablet lo usa mi mujer para ver el facebook, el pinterest y tal. Coincido con el comentario anterior. Yo soy más de pc y sé que soy una especie en extinción.
Por mi trabajo trato mucho con jóvenes y esa es la impresión que me da. Ellos no van a usar ni tablets ni pc’s, porque con el móvil les basta para lo que necesitan: conectarse a las redes sociales principalmente. Eso no quita que te encuentres a una leyéndose un libro en una pantalla realmente chica o estudiando los apuntes o buscando información en internet (y que esto no sea más que una odiosa generalización).
Y como sé que te «gustan» los teléfonos grandes, te aviso que hoy he encargado uno de estos: ulefone u7 phablet. Voy a dejar de llevar conmigo el portátil+smartphone de 4,5 pulgadas y cuando necesite crear algo fuera de casa, me apañaré con el pc que haya, mi pendrive y una plataforma on-line.
Ahí le has dado, los chicos parecen pasar bastante de los tablets, y el móvil es, como decía Curtis, el vehículo que utilizan para conectarse a Internet. No parece que necesiten más, y eso complica el futuro de los tablets.
Del ulefone qué te voy a decir. Qué horror 😉 Ya contarás!
Pues yo no estoy tan seguro de que el móvil se vaya a «comer» a las tablets y al PC, sino que más bien lo que va a ocurrir es que se diversifiquen el uso y las necesidades tecnológicas de cada persona. Me explico: yo hace un año y medio me compre un Asus Phonepad esperando cubrir con un solo dispositivo las necesidades que tengo de ambos productos (llamadas / whatsapp / correos para el móvil y lectura de libros, cómics, webs y peliculas para el tablet) con un solo dispositivo. Incluso me llegué a plantear su uso como sustituto del PC en movilidad para editar fotos o picar un poco de código en cualquier sitio. El resultado en mi caso fue un fiasco, porque este producto no realizaba bien ninguna de las tres funciones (especialmente la del móvil).
Por otro lado veo que pese a que la tendencia del mercado es tener pantallas más grandes cada vez, ya hay cierto run run (mediático y entre los tecnogeeks) de vuelta a los terminales manejables que ronden las 4.3 pulgadas pero con calidades premium (¡no estás solo, Javi! ; P ). Me parece que es obvio que la gente que prefiera estos dispositivos más manejable tendrán aparte uno más grande para navegar, ver series, etc., ya sea tablet o sea PC hasta que se de la más que probable convergencia.
Además, veo en mi entorno que la necesidad de un PC es todavía algo generalizado (y aquí si que me parece cierto que el portátil ha canibalizado por completo al sobremesa) para todo el mundo: jóvenes o mayores, hombres y mujeres, estudiantes o trabajadores casi todos tienen su portátil personal y que lo usarán más o menos, pero en momentos puntuales todos recurren a él, ya sea para escribir un word, ya sea para bajarse una peli, ya sea para trabajar -en este último punto sí que no hay duda de que las arquitecturas de los PC’s les proporcionan una ventaja brutal sobre las ARM de los móviles-.
Con todo esto quiero decir que pese a que las ventas de PC decrezcan y las de Tablets se estabilicen, no creo que ninguna de las dos categorías «mueran» a corto plazo y que soluciones 2 en 1 tipo Surface o Asus T100TA cobrarán mucha importancia – como dispositivo principal o como complemento al móvil – a poco que se sepan promocionar correctamente (y si whatsapp sacara una versión web ya ni te cuento). Creo que la proporción de uso de cada tipo de dispositivo se estabilizará en algún punto y que el triunvirato móvil – tablet – PC existente en el mercado actual va para largo.
Saludos!
Yo no estoy muy de acuerdo con las reflexiones que hacéis sobre las tablets y los smartphones…
En mi opinión es un problema económico más que de utilidad o utilización… es evidente al analizar cómo aumenta el porcentaje de usuarios de tablets a medida que aumenta el poder adquisitivo con la edad. Cuestión de leer la estadística que como todos sabemos según se interpreten pueden dar información discordante.
Los más jóvenes tienen un teléfono, pero no quiere decir que no quieran un tablet, sino que no se lo pueden pagar. O sus padres no se lo van a pagar. No olvidéis algo tan importante como esto.
Si nos ceñimos a la utilidad como medio de comunicación de un dispositivo electrónico, el smartphone es más que suficiente, y ni hacen falta pantallas grandes ni leches. Además, los de grandes pantallas no son los más extendidos. Habáis como si todos esos «niños» tuvieran un Xperia Z, un HTC One o un Note.
No os equivoquéis. Entre 15 y 20 años tienen teléfonos de entre 3,5 y 4,5″ que son los que les pagan su padres. Cuando empiezan a tener mayor poder adquisitivo se compran teléfonos más caros y más grandes, y curiosamente es cuando más tablets también. Puede que los más pudientes tengan teléfonos más caros pero con la cantidad de robos a adolescentes que hay no están las familias para comprar teléfonos de 600€ a sus hijos cada dos por tres.
Tema aparte es la utilidad del tablet como sustituto del PC, que si bien no está en condiciones de hacerlo para algunas cosas, desde luego que en lo más habitual sí es una alternativa y mucho más satisfactoria que un smartphone. Lo que pasa es que uno se da cuenta cuando «accede» al tablet y no antes, es decir, cuando su poder adquisitivo se lo permite.
Todas las conclusiones que podáis sacar sobre las edades y el uso de dispositivos móviles hay que ponerlas en un contexto socioeconómico porque fuera de él, cualquier estadística puede decirnos lo que queramos que diga.
Y me pregunto en que rango de edades está el 41% de usuarios de tablets restantes que no pertenecen al (18+16+25) 59% representado de los 15 a los 55 y no creo que sean mayores de 65 ni menores de 15 todos. De hecho es que no me termino de confiar en conclusiones de estadísticas con muestras poco representativas o incompletas en el estudio.
Pues yo pondría el móvil y el tablet dentro del mismo saco. Entendiendo que cada uno utiliza el que le es más comodo.
Pero lo que si que nos han cambiado es el hecho de «encender pc» para ir a internet y los métodos de entrada. Raton/teclado – input táctil
El sistema de… Apps en detrimiento de los programas