Llevo semanas perdiendo la batalla con un vídeo publicitario. No sé ni de qué va porque no le presto atención, pero ahí está siempre, cual mosca coj***ra.

Los tipos que lo han insertado en todas partes (y aquí incluyo a los medios de Weblogs SSL) han tenido la ideaza de no ofrecer forma alguna de desactivarlo. No hay botón de pausa, no hay botón de cierre, nada. La única forma de deshacerse de él es pinchar para que se abra otra pestaña, lo que provoca que puedas cerrar esa pestaña y el vídeo se pause por fin en la que estabas visitando. Y ni por esas: hay veces que el maldito vídeo sigue reproduciéndose impasible. Inmortal.

Esos vídeos en autoplay o en reproducción automática, que queda más largo aunque sea español a tope, son la última condena de esta web nuestra de cada día. Una que se ha ido contaminando con páginas cada vez más pesadas, más cotillas con todo lo que hacemos en ellas y más llenas de publicidad y elementos que tratan de distraernos y de hacernos mirar donde realmente no interesa.

Every website in 2018 pic.twitter.com/Gm7jhfuuUO

— Daryl Ginn (@darylginn) October 20, 2018

Es algo de lo que hablaba hace poco, si os acordáis. Aquel ‘Web, deja de molestarme‘ se inspiraba en el mensaje en Twitter de Daryl Ginn en el que una exagerada parodia de lo que era una página web en 2018 no era ni tan exagerada ni tan parodia. Los avisos de cookies, los vídeos en reproducción automática y las notificaciones push no paran de molestarnos, y para la inmensa mayoría de los mortales convivir con estas condenas es ya algo rutinario.

Qué triste.

Yo había tratado de luchar con estos elementos hace meses, pero por alguna razón dejé de hacerlo y he seguido aguantando todas estas historias cual zombie. Hoy, en la enésima aparición del vídeo de marras, me ha cansado y he acudido al oráculo Google para que me soplase cómo deshacerme de ellos en mi navegador, Firefox.

Al hacerlo me he dado cuenta de que el método antiguo que yo había aplicado no funciona desde hace tiempo, y de hecho he encontrado solución (creo que total, veremos en los próximos días) a tres de esas condenas de la web de nuestros días:

1. Vídeos en reproducción automática: en Firefox hay que ir (lo explican en soporte de Mozilla) a los parámetros de configuración (about:config en la barra de direcciones) y buscar media.autoplay.default para establecer su valor en 1. Si queréis ir más allá, también podríais ir a media.autoplay.allow-muted y ponerlo a false.
2. Peticiones push: todos esos mensajes de «Pepito quiere notificarte cuando haya nuevos contenidos» o «Pablito quiere saber tu ubicación, ¿le dejas?» desaparecen con otro parámetro de la configuración de Firefox que también aclaran en el soporte de Mozilla. Es dom.webnotifications.enabled, que deberéis ponerlo a false.
3. Cookies: ya sé que todos los sitios recolectan cookies, así que los avisos de que lo hacen me la refanfinflan. No quiero que aparezcan, y aunque hay otros métodos, yo acudo a la extensión I don’t care about cookies (me la descubrió José Luis en los comentarios del post anterior, ole) que está disponible para Firefox y para otros navegadores.

Listo. Si sois usuarios de Firefox como yo os podréis evitar un montón de pop-ups y vídeos en reproducción automática con estos consejitos. De momento soy feliz: aquel inmortal vídeo no lo era tanto: ya no se atreve a aparecer. Al menos, no de momento.

Prueba superada.