Antes de ayer comentaba lo impresionado que quedé ante la organización y el resultado del evento de entrega de Premios Xataka 2013. Nuestros particulares «Oscars de la tecnología» dejaron el pabellón altísimo, pero por supuesto no todo fue ideal, y había dos temas que sí merecen una reflexión aparte. Esas dos reflexiones, no obstante, ya las han hecho muy bien otras dos personas.

La primera de ellas es de Miguel Ángel Uriondo, periodista de Actualidad Económica que habló de esa prepotente postura de una Apple –oí otros calificativos durante los premios– que aparentemente no tiene la capacidad de bajarse de su pedestal para compartir un rato con los medios y la industria. Ya lo he comentado en varias ocasiones: Apple hace muy bien muchas cosas, pero su actitud altanera –probablemente impuesta por Apple USA y no compartida por todos en Apple España, y aún así, inexcusable– provoca sentimientos encontrados. Como dice Uriondo, a los que fuimos jurados nos dan ganas de saltarnos nuestra objetividad (esa que muchos creen que no tenemos) y votar en contra de Apple solo por poner a estos chicos en su sitio. Me gusta especialmente su penúltimo párrafo:

Siempre me ha gustado eso de «arrieritos somos y en el camino nos encontraremos». Apple un día necesitará un premio justo cuando no lo pueda ganar. Si un día se caen de la torre, nadie sentirá lástima por ellos.

La segunda reflexión viene de Antonio Ortiz, mi jefe y coordinador editorial en Xataka, que hoy ha escrito un fantástico, honesto y descarnado artículo en el que explica cómo es el proceso de votación y en el que deja claro que los premios difícilmente pueden dejar satisfecho a todo el mundo. Da el ejemplo del mejor smartphone de gama alta: salió elegido el iPhone 5S y eso provocó abucheos de todo tipo. En vivo entre los asistentes, y también digitales a posteriori entre los comentaristas y entre los tuiteros, que harían bien en leerse el post para tratar de ver las cosas desde el punto de vista de quien, como Antonio y el resto del equipo, intenta hacer las cosas de la mejor y más objetiva forma posible.

Cierro el repaso presumiendo, que para eso estoy en mi blog. Antes de la entrega efectiva de los premios se realizaron dos mesas redondas, y en la segunda,  Claves del mercado móvil en 2014, fui uno de los participantes. No tuiteé ni comenté nada antes porque estas cosas me dan muchísima vergüenza (escribo mejor que hablo, eso lo tengo claro), pero si no lo visteis y tenéis ganas de comprobar el resultado –que yo creo que fue muy digno, no tanto por mi parte sino por el conjunto– tenéis el vídeo de las dos mesas redondas disponible a continuación. La parte en la que yo intervengo comienza aproximadamente en el punto 1:33:00.