Es obvio que Carrie Fisher –yep, la princesa Leia– hablaba de otro tema cuando dijo esto en su papel de Marie en «Cuando Harry encontró a Sally» (en mi top 3 de todos los tiempos), pero la frase me viene al pelo para abrir el tema de hoy.
Marie: Everybody thinks they have good taste and a sense of humor but they couldn’t possibly all have good taste.
La de verdades que sueltan los protas de esa peli. Por supuesto que no todo el mundo puede tener buen gusto, y aunque reconozco que soy un zote en el tema moda –quizás por eso me mata el rollo egoblogger— la verdad es que en diseño web lo tengo todo muy claro, y creo que sé lo que funciona y lo que no funciona tanto. Eso me ha dado muchos problemas en el pasado. Muchas batallas perdidas que hicieron que al final dejara ese apartado en manos de analfabestias digitales, y otras muchas que perderé porque hay mucho cabezón que no se ha visto la peli en cuestión y no sabe que, como decía Marie, no todo el mundo puede tener buen gusto.
El problema es que el impacto visual de una historia es ahora casi tan importante como la historia en sí. Voy a ser malo y poner un ejemplo claro de esos medios que no tienen absolutamente ningún criterio a la hora de darle forma a un fondo que no es necesariamente malo. IDG España es un absoluto desastre en ese cuidado por la forma. A una home que no se puede coger ni con pinzas y en la que las palabras luchan por respirar le siguen unas singles (los artículos en sí) que no tienen salvación. Para muestra un botón. Párrafos sin principio ni fin aparente, elección de tipografías realizada en un bingo, y una separación de bloques (cabecera y navegación artículo, comentarios y barra lateral –mínimamente salvable–) que pareciera haber sido ejecutada con esa afición española por lo provisional para siempre.
Enfrente tenemos a plataformas en las que la historia en sí misma cuenta casi tanto como la forma en la que ésta se presenta al lector. Este año hemos empezado a ver el despegue de un diseño web adaptado a las historias. Los art-directed posts de los que hablaba no hace mucho son solo una pata de esa tendencia en la que un medio es diferencial por esa presentación de ciertas historias. En tecnología lo han hecho muy bien tanto The Verge como Polygon, y salvando las distancias en Xataka mis compis han hecho un primer y loable esfuerzo por diferenciarse también en ese apartado.
Y luego, claro, llegamos a los maestros. A aquellos medios que personalmente yo leo solo por el placer de leerlos. Nunca los leería de no ser por la forma en la que presentan las historias, y esa es la clave. Hoy he descubierto de golpe tres de ellos (dios mío, el tiempo se me escapa y descubro esto) y el post era por tanto obligado. Ya hablé de un absolutamente delicioso Nautil.us o un cada vez más fantástico Medium –el rediseño ha mejorado lo que ya de por sí era un prodigio–, pero es que a este medio se le han sumado otros. No hace mucho me encontré por casualidad con The Dissolve –maravillosa para amantes del cine– y mucho más recientes es por ejemplo Victory Journal. Si os gustan las historias del deporte –no las crónicas deportivas, en las que para mi las de El País son un ejemplo en su fondo– poned este medio ya en vuestros marcadores. Y si no me creéis, atentos a esta absoluta maravilla de la narrativa web moderna. Im-per-di-ble.
Si os habéis recuperado y queréis más, otros dos ejemplos, aunque en este caso, aislados. Se trata de este artículo de Rolling Stone –que no lo hacen de todo mal mal en su medio online, pero que aquí lograron una verdadera preciosidad– y de este otro de IGN con un impecable (puede que menos que el anterior) repaso a la historia de Mario. Ambos forman parte del llamado HTML5 Hub, una iniciativa destinada a mostrar la potencia de HTML5 que ha reunido a genios del diseño web y la programación y que deja clara una cosa: este estándar va a ser el responsable de que en un futuro no muy lejano esas maravillas sean mucho más frecuentes.
Como decía, hoy había descubierto tres ejemplos más de ese gusto por la forma, además de por el fondo. Narratively es la primera y más destacada, con The Ascender (qué nombre tan chulo) y Unmapped (la más flojita) aprovechando de forma potente ese nuevo CMS llamado Marquee que probaré en breve (tú también puedes) y que recuerda claramente a Medium.
Por supuesto, hay más, y muchos que aún quedan por descubrir, así que si tenéis recomendaciones, por favor, aportad en los comentarios. Yo ya me he quedado con la copla y preparo un (espero) inminente rediseño de Incognitosis que tomará algunas de las ideas (con mis limitados recursos, eso sí) de estas maravillas del periodismo online. Y preparaos, porque afortunadamente se acerca una nueva era para los medios online en la que, como digo, la forma tendrá casi tanta relevancia como el fondo.
Y el que no se haya dado cuenta, que se vaya preparando para pasar al olvido. Cuántos candidatos peligran, chicos. De aquí, y de allá.
El mejor ejemplo de lo que hablas sobre las formas es la cocina. Y aquí hace tiempo que mucha gente va entendiendo que aunque la tradición es buena, más bueno es la presentación manteniendo la tradición.
¿A cuanta gente le gustan las sardinas?
Pues seguramente a mucha gente que no le guste, si ven ésto http://imageshack.us/photo/my-images/841/mh7d.png/ seguirá sin gustarle.
Pero si se les presenta de esta manera http://imageshack.us/photo/my-images/823/e0uq.png/ igual lo prueban y les gusta.
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Gracias por esta impresionante recopilación. No conocía la mayoría de esos ejemplos.
Mi gran duda, ahora, es dónde se está desarrollando el CMS libre capaz de dar una experiencia similar a estos.
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