El otro día asistimos (¡pipi!) a nuestra primera clase preparatoria para lo que nos espera (¡minipipi!) y uno de los maridetes que había por allí hablaba de lo que molaban las ecografías 4D. Estuve a punto de corregirle, pero me callé, porque también hubiera tenido que corregir a todos los servicios que precisamente ofrecen estas «ecografías 3D». Este debería ser el nombre: si se contara el tiempo como una dimensión más en las películas, todas serían 3D, menos Avatar, por ejemplo, que sería una peli 4D «de verdad».
Fin de la anécdota, que da pie un poco al post de hoy. Como decía, el pelotazo de la mencionada Avatar y de sus tres dimensiones provocaron uno de esos fenómenos mediáticos que hacía pensar que el futuro inmediato de las televisiones, consolas y otros dispositivos de entretenimiento debería pasar por huevos por el soporte de tecnologías 3D. Muchos fabricantes -Sony a la cabeza- se comenzaron a poner las pilas al respecto y anunciaron todo tipo de opciones en este campo, mientras que en Hollywood parecía de repente que si no se hacían las pelis en 3D (aunque fuera un 3D de palo) no se podían hacer las pelis.
Eso, claro está, hizo que los anuncios de nuevos televisores con soporte 3D comenzaran a publicarse en todo tipo de medios. Así podríamos ver el mundial en 3D, los toros en 3D (en Cataluña ni en 3D ni en 2D, al menos no en sus plazas), e incluso a los fantásticos profesionales de nuestra televisión en 3D como Ana Rosa Quintana (miedito) o esos intelectuales y trabajadores infatigables que participan en Sálvame, DEC y otros programas de culto nacional que demuestran el analfabetismo generalizado.
Pero es que no es en las 3D donde está el futuro de la tele, amigos míos -seáis intelectuales o no-. Al menos, no en la medida que nos quieren vender. El futuro está en las llamadas Internet Enabled TVs, o lo que es lo mismo, las televisiones con conexión y acceso a Internet. Ahí está el negocio, señores de la industria.
La interfaz propuesta por Google TV es, sencillamente, genial.
Ya lo he comentado en otras ocasiones: nadie ha logrado conquistar el salón de casa con una solución unificada que trate de reemplazar o de acompañar al menos al televisor tradicional. Las consolas, Apple TV, los TiVo: todos han acabado siendo productos de nicho (con mayor o menor éxito) que no han logrado el tirón que hubieran querido sus fabricantes.
Sin embargo la ventaja de las IETVs es el hecho de que no es necesaria una revolución de los contenidos, un cambio radical de nuestros hábitos: estas teles serán exactamente iguales a las que ahora tenemos, solo que además de su pantallita plana y su decodificador de TDT de discutible calidad nos ofrecerán una entrada RJ45 o un pequeño adaptador WiFi inalámbrico que nos permitirá conectarlas a Internet como un dispositivo más de nuestra red de área local.
Atentos a las estimaciones de iSuppli: se venderán un porrón de IETVs. No tanto 3-D TVs.
No queda mucho para ver esos inventos: en iSuppli afirman que este año el mercado de IETVs crecerá un 124,9% con respecto a 2009, y se comprarán 12,3 millones de televisores en todo el mundo. No son muchas, vale, pero es que en 2014 ese número habrá ascendido según esas estimaciones a 148,3 millones de unidades. Normalmente las previsiones de esta gente son bastante acertadas, pero yo diría que van a tener que revisarlas dentro de muy poco porque a menos que me equivoque, las televisiones con Internet se van a vender como churros. Más que los netbooks, más que los reproductores de TDT y más que cualquier consola o set-top-box del mercado.
En esa apuesta mía (¿quién se juega una mahou?) veo claro que en 2, 3 o 4 años como máximo muchos de los que estamos más o menos inmersos en esto de Internet no podremos evitar la compra de una de estas televisiones, pero es que además habrá otro protagonista muy llamativo: Google TV.
Ya hablé de Google TV en aquel prodigioso artículo mío (uno más) del «Olvidaos de la tele tal y como la conocisteis«, y si todo va como debe seguramente buena parte de los televisores que se produzcan adopten la plataforma de Google como base para esa capacidad, aunque probablemente acaben surgiendo propuestas propias de los fabricantes o alternativas adicionales basadas en Linux o de empresas como Apple o Microsoft.
Pon una tele con Android en tu vida…
No tengo claro esto último, pero veo un futuro de plataformas software para televisiones del mismo modo que lo hemos visto primero para PCs y luego para los móviles. Llegados a este punto uno puede preguntarse ¿para qué sirve que la tele esté enchufada a Internet? Un par de vídeos de Google dejan claro qué pretenden:
Así pues, preparaos, chicos.
Cuando tienes razón, se te da. Amén a todo excepto a un «pequeño» detalle:
«Sin embargo la ventaja de las IETVs es el hecho de que no es necesaria una revolución de los contenidos…»
La razón por la que aún no se ha producido la explosión de estos dispositivos es precisamente porque AÚN NO se ha producido esa revolución.
Hasta que los proveedores de contenidos no cambien su modelo de negocio e incorporen la posibilidad de ver series de estreno en streaming cuando el cliente quiera, los AppleTV/ GoogleTV no tienen ni la más mínima posibilidad por muy cucos que parezcan.
Los contenidos es precisamente la clave del asunto. Lo bueno es que a finales de año la guerra se recrudece.
Veremos.
Pues yo en 6 meses y ya estoy «viciao» con todo en alta definicion (2D), principalmente en 1080p (porque la tv es 1080p), aunque 720p se ve practicamente igual y ocupa la mitad. Ya no disfruto si no es asi, que asco,je,je.
Ahora el tema es, ¿como metes ese ancho de banda por una red?, porque la de 100 mb/s por cable con el wd live no va, ni con os-x, ni windows, puede ser cosa del wd live, pero me da a mi que no…, asi que, desde mis 18 mb/s de internet (que suerte he tenido) hasta algo que nos de, a TODOS, mas de 100 mb/s lo veo chungo, por lo menos para mi que como digo me he vuelto sibarita.
Pregunta del millon, ¿si los contenidos son a 24, 25, 30 fps? y las tv pueden poner 50 y 60 fps, porque me tengo que comprar una tv nueva para las 3d? ¿no es suficiente con sincronizar el «emisor 3D» con las gafas (quizas ajustando el retraso de la tv)?, 30 imagenes para cada ojo, 60 para los dos, ¿es suficiente?.
Saludos
Aclaracion, por lo menos con gafas de obturacion.
En los ultimos cinco años la tecnologia television ha evolucionado más que en los anteriores 45, lo bueno de 3DTV que los FULL HD han bajado su precio y ahora cualquier vecino en Cataluña ya puede disfrutar de estos (otra cosa muy diferente es la falta de contenidos en HD)
Macho, como has aprovechado para sacar tus neuras sobre lo de Catalunya (que tendría que prohibirse en toda España, pero bueno) cuando estás hablando de TV, va y lo mezclas con lo de las plazas, porque los catalanes podrán seguir viendo (si es que quieren seguir viendo ese salvaje espectáculo de sangre y sufrimiento) por TV.
Creo que nadie podemos reprimir este tipo de cosas, incluso metiéndolo con calzador.
Por otra parte, la previsión de los analistas es muy sencilla y ya se apunta; mientras las TV adaptadas a 3D seguirán siendo una minoría (y más caras), ahora cada vez están bajando más el precio de las TV que ya llevan incluida internet TV. Más que por el interés de la gente, es porque el fabricante simplemente las va a incluir (al igual que entrada usb para reproducir películas desde dispositivos externos, cada vez más TV las incluyen y por ello ¿es el futuro?, me gustaría ver ese gráfico incluyendo esta tercera opción). A día de hoy, la enorme mayoría de la gente ni sabe lo que es internet tv, ni las posibilidades que le puede ofrecer, falta información.
Y si, sin duda a medio plazo, en cuanto la información se haya extendido, estoy convencido que los usuarios veremos las series y contenidos cuando y como nos dé la gana sin tener que esperar a poder grabarlos antes. Es una comodidad absoluta. Pero no sólo eso, el acceso a las noticias (y otros servicios) de internet tv reemplazarán al teletexto. E incluso, para muchas de las acciones más básicas de internet (ver como se actualizó tu página facebook, google maps, etc…) se usará la TV y cada vez menos el ordenador, que será algo solo para hacer cosas más serias.